NUEVA YORK. El díscolo inversor Bernard Madoff se declarará culpable el próximo jueves de un total de once cargos entre los que se contempla lavado de dinero, perjurio y fraude, por los que el fiscal ha solicitado hasta 150 años de cárcel y una multa que podría duplicar el montante de la estafa, calculado en 50.000 millones de dólares. Las partes implicadas en el caso acordaron ayer un principio de acuerdo en un tribunal de Manhattan. Ira Sorkin, el abogado de Madoff, aseguró que "es de esperar" que su cliente se declare culpable de buena parte de los cargos que pesan sobre él. Sin embargo, se quejó de que los fiscales han impedido a los letrados de Madoff tener acceso a los informes financieros de las operaciones del inversor, donde se puede demostrar que algunos de sus clientes registraron menos pérdidas de las denunciadas. En los informes presentados ante el tribunal del juez Denny Chin, los fiscales afirmaron que Bernard Madoff fue el artífice de un masivo esquema de Ponzi en el que buena parte de sus clientes fueron engañados. A la espera de lo que pase el próximo jueves, el juez Chin aseguró que no dictará sentencia en los próximos meses, por lo que Madoff podría disfrutar de su libertad vigilada por un tiempo indeterminado de tiempo. En la esperada vista del jueves está previsto que una veintena de personas estafadas por el ex presidente del Nasdaq estén presentes durante la comparecencia del financiero ante el magistrado encargado del caso.