El Embargo de crudo iraní gana apoyo en Asia y Europa
Mientras un diario cercano al clero gobernante invitaba a asesinar funcionarios israelíes en represalia por la misteriosa muerte de un científico nuclear iraní, un ex inspector de la ONU dijo que una nueva planta protegida de los bombardeos podría suministrar a Teherán uranio enriquecido para crear una bomba atómica en apenas un año.
El plazo agravó las tensiones por la disputa nuclear, en medio de las especulaciones de que Israel y Estados Unidos podrían recurrir a una intervención militar contra la república islámica, una posibilidad que según acuerdo un colaborador cercano del líder ruso Vladimir Putin es cada vez más probable.
Irán niega todas las acusaciones de Occidente de que intenta fabricar armas nucleares.
La amenaza de que se interrumpa el comercio de petróleo en el Golfo, ya sea por una guerra o simples bloqueos, ha mantenido los precios del crudo en niveles firmes.
Un día después de que un asesino a sueldo en una motocicleta matara a un ingeniero de 32 años en hora punta en Teherán, muchos iraníes dirigieron su irritación por la violencia y las sanciones económicas hacia las potencias occidentales, que esperaban volcar el sentimiento popular en contra de una clase dirigente cada vez más dividida.
"Deberíamos vengarnos de Israel por martirizar a nuestro joven científico", escribió Hosein Shariatmadari, editor jefe del diario Kayhan, nombrado por el líder supremo iraní, el ayatolá Ali Jamenei.
"Esta gente corrupta es fácilmente identificable y está dentro de nuestro alcance (...) Los asesinatos de militares y funcionarios del régimen sionista (Israel) son muy fáciles", añadió.
Aunque se ha negado a comentar las acusaciones de que es responsable del atentado del miércoles, Israel ha llevado a cabo ese tipo de acciones en el pasado y estará en alerta ante posibles represalias.
El jefe del Consejo de Seguridad del Kremlin, Nikolai Patrushev, aliado de Putin, acusó a Israel de estar instigando una guerra. "Hay una probabilidad de una escalada militar del conflicto, hacia el que Israel está llevando a los estadounidenses", dijo a la agencia Interfax.
El ex jefe de inspecciones nucleares de la ONU Olli Heinonen afirmó que el anuncio esta semana de que Irán ha iniciado el enriquecimiento de uranio en un búnker subterráneo le permitirá tener un material suficiente para crear una bomba nuclear a principios del año próximo.
Sin embargo, aún no está claro si ya tiene la capacidad de hacerlo.
IMPORTADORES ASIÁTICOS
Desde que el presidente de EEUU, Barack Obama, firmó leyes destinadas a paralizar las ventas de petróleo iraní hasta que ceda en la disputa nuclear, los grandes importadores han tomado posición, presionados ante el dilema de no romper con Washington y a su vez satisfacer su demanda del crudo iraní.
Japón, con una economía ya deprimida tras las interrupciones que causó el tsunami del año pasado a su industria nuclear, ha prometido tomar medidas concretas para reducir sus importaciones desde Irán en respuesta a una petición del secretario del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner.
Sin embargo, el respaldo de Tokio no ha sido sin reservas. El ministro de Hacienda, Jun Azumi, explicó que el crudo iraní supone el 10 por ciento de las importaciones generales de petróleo de Japón.
"Nos gustaría tomar medidas concretas para reducir (eso) aún más, de una forma planificada", dijo, aunque añadió: "Causaría un daño inmenso si se redujeran a cero".
El jefe del Tesoro estadounidense agradeció la cooperación de Japón, una señal alentadora para su política exterior después de que China rechazara sus argumentos a favor de las sanciones durante su gira por Asia.
Un tema que afecta la voluntad de los gobiernos asiáticos de seguir el impulso de Washington es la disponibilidad de suministros alternativos a los de Irán, el segundo mayor exportador de la OPEP después de Arabia Saudí.
Aunque está dispuesto a ayudar, no está claro hasta qué punto el reino saudí puede aumentar su producción y exportaciones para compensar el crudo iraní perdido.
Japón ya ha buscado suministros adicionales de Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos (EAU). El primer ministro chino, Wen Jiabao, visitará esos dos países y Qatar este fin de semana y el primer ministro de Corea del Sur, otro gran consumidor de crudo iraní, viajará a EAU y Omán el viernes.
En tanto, la Unión Europea se ha mostrado más flexible ante la presión estadounidense. Los ministros de Exteriores del bloque tienen previsto acordar un embargo de las importaciones de crudo iraní el 23 de enero.
Sin embargo, incluso Europa, cuyos gobiernos comparten con Israel y Washington las sospechas sobre las ambiciones nucleares de Irán, está analizando cómo limitar el impacto de un embargo.
"Esperamos una implementación gradual y lenta de lo que finalmente será un embargo total", dijo Mike Wittner, de Societe Generale. "Europa tiene las mismas preocupaciones por su frágil economía y los aumentos del precio del petróleo que Estados Unidos, o quizá más", puntualizó.
/Por Parisa Hafezi/