M. Continuo

Convocada una huelga en Italia contra el plan de austeridad



    ROMA (Reuters) - La mayor confederación sindical de Italia convocó el martes una huelga general para el 6 de septiembre en protesta contra un plan de austeridad del Gobierno, que calificó de "injusto y equivocado".

    La convocatoria, aunque era ampliamente esperada, supone otro revés para el primer ministro Silvio Berlusconi, cuya popularidad se ha hundido en los últimos meses y que se ha visto obligado por el Banco Central Europeo a adoptar un plan de austeridad con recortes por valor de 45.000 millones de euros.

    Al verse Italia envuelta en la crisis de deuda de la zona euro en las últimas semanas, el BCE le exigió que adelantara su meta para equilibrar el presupuesto a 2013 como condición para comprar sus bonos y mantener sus rendimientos controlados.

    Los rendimientos de los bonos italianos a 10 años se encuentran alrededor del cinco por ciento, notablemente por debajo del 6,5 por ciento que llegaron a alcanzar antes de la intervención del BCE pero aún demasiado elevados. En septiembre vencen unos 62,4 millones de euros en bonos.

    El plan de austeridad se encuentra en el Parlamento, con la mayoría gobernante dividida sobre qué cambios hacer a la versión aprobada por el Gabinete el 12 de agosto. Tiene que aprobarse a mediados de octubre, pero Italia está bajo una gran presión por parte de los mercados y de sus socios internacionales para hacerlo antes.

    Las esperanzas de tener un amplio apoyo parlamentario han disminuido en los últimos días, y el martes el principal partido de la oposición, el Partido Democrático, anunció que presentará sus propias propuestas.

    El ministro de Bienestar, Maurizio Sacconi, calificó de "injustificable" el anuncio de huelga del sindicato CGIL, que ha criticado las medidas de austeridad por los recortes a los ayuntamientos y el gobierno central, los planes de liberalizar los contratos laborales y una falta de estrategias para combatir la evasión fiscal.

    Berlusconi ha insistido en que la cuantía total de los recortes no cambiará, pero sus planes han recibido amplias críticas y varios llamamientos para enmendarlos.

    Una polémica medida fija un "impuesto solidario" a quienes ganan más de 90.000 euros anuales, que se cobrará durante tres años. Sindicalistas y líderes empresariales argumentan que un impuesto sobre la riqueza en vez de sobre los ingresos laborales habría sido mejor, ya que habría afectado a los evasores tributarios que no declaran su ingreso real pero suelen tener grandes activos.

    La reforma de las pensiones también ha sido un foco de debate. Las propuestas del gobernante PDL de retrasar la edad de jubilación encontraron una feroz oposición de su socio de coalición, la Liga Norte.

    La CGIL señaló que celebrará una conferencia de prensa el miércoles para presentar sus propuestas alternativas. El sindicato tiene al menos seis millones de miembros, de los cuales más de la mitad son jubilados. El año pasado asumió su dirección Susanna Camusso.

    La confederación suele estar enfrentada con los más pequeños y moderados CISL y UIL, que han rechazado la petición de Camusso de una huelga conjunta, aunque también han criticado las medidas de austeridad.