Campesinado pobre ocupa Asunción para pedir reparto justo de tierras
La Gran Marcha del Campesinado Pobre reunió a unos 10.000 campesinos de todo el país, según los organizadores, y recorrió las principales avenidas de la capital hasta llegar frente al Congreso Nacional, donde los manifestantes exigieron la dimisión del presidente paraguayo, Horacio Cartes.
"Cartes no persigas a los pobres" y "Horacio, fuera del Palacio", fueron algunas de las consignas más coreadas durante la marcha, que discurrió durante unos dos kilómetros bajo una intensa lluvia.
Sombreros de paja, chubasqueros de todos los colores, pancartas y banderas servían a los manifestantes como refugio ante el continuo aguacero que no modificó ni el recorrido ni la intensidad de los reclamos de los campesinos.
Niños, hombres y mujeres de todas las edades participaron en la marcha que desde hace 22 años convoca la Federación Nacional Campesina (FNC), principal asociación de pequeños productores agrarios de Paraguay, para pedir además una reforma agraria justa y acceso a servicios públicos como los de salud y educación.
Como cada año, los manifestantes desfilaron con palos en la mano, símbolo tradicional de la lucha campesina, y denunciaron el empeoramiento de sus condiciones de vida debido a la merma de ingresos económicos.
Atribuyeron a ello la caída de los precios de los productos agrícolas y la intervención de intermediarios.
"Chokokue oku'e tetä pyahu rekávo" (el campesinado se mueve por una patria nueva, en idioma guaraní) fue el eslogan de la manifestación de campesinos, llegados la víspera desde diferentes comunidades de los departamentos de la región oriental de Paraguay.
"La única manera de lograr vivir con dignidad y felicidad es a través de las transformaciones profundas del modelo económico basado en el latifundio y en el modelo agroexportador", dijo a Efe Marcial Gómez, secretario general adjunto de la FNC.
Según la ONG Oxfam, Paraguay es uno de los países con mayor concentración de tierras del mundo, donde menos del 3 por ciento de la población es dueña de cerca del 85 por ciento de la tierra.
Gómez destacó la paradoja de que en Paraguay la tierra sea la mayor fuente de riqueza, pues es uno de los mayores exportadores de carne y soja transgénica del mundo, mientras que en el campo se concentra su mayor pobreza, que afecta al 44,8 % de los habitantes rurales, según los últimos datos de la ONU.
El país suramericano es además uno de los más desiguales del mundo, según su coeficiente Gini, la medida más usada para medirla.
En los últimos cinco años, el índice de desigualdad subió de 0,521 a 0,526 en Paraguay, mientras que en el resto de Suramérica bajó.
"Definitivamente, Cartes y su política están para el beneficio de los latifundistas, además permite que empresas trasnacionales acopien lo recursos que nos quedan en el país", añadió el dirigente campesino.
Los manifestantes cargaron también contra la ley de "alianza público-privada", promovida por Cartes a su llegada al poder hace un año y ocho meses, y la calificaron como "ley de entrega y de saqueo de los recursos del país".
Por su parte, Griselda Aguilar, dirigente de la Juventud del Partido Paraguay Pyahura, dijo a Efe que la falta de tierras, créditos y servicios en el campo repercute sobre todo en la vida de las mujeres.
"Sufrimos falta absoluta de centros de salud, y cuando existen no tienen cirujanos, ni obstetras, ni enfermera ni medicamentos", expresó.
Aguilar aseguró que las mujeres de su comunidad, en el departamento de San Pedro, uno de las zonas más pobres del país pese a tener la tierra más fértil, deben recorrer unos 70 kilómetros para llegar al centro de salud más cercano.
"Muchas paren o mueren en el camino. El Estado permite el abandono total", resaltó.
Los organizadores de la marcha anunciaron que en mayo realizarán una nueva gran movilización campesina en Asunción.