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La directora Antifraude se desmarca de De Alfonso pero no evita la petición de cese



    Barcelona, 20 jul (EFE).- La directora interina de la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC), Maite Masià, se ha desmarcado hoy de su predecesor, Daniel de Alfonso, aunque no ha evitado que la oposición le haya pedido que dimita por su falta de independencia, ya que militaba en CDC hasta que ingresó en este organismo.

    Masià, que como directora adjunta de Antifraude asumió el pasado 30 de junio la dirección interina tras la destitución de De Alfonso, ha comparecido hoy en el Parlament, donde ha reconocido ante los diputados que antes de llegar a la OAC, en octubre de 2009, se dio de baja como militante de Convergencia Democrática (CDC).

    La directora interina ha justificado que en apenas quince días en el cargo haya destituido a la jefa de gabinete, porque no reconoció su autoridad una vez asumido el cargo, y a los tres directores del organismo -de Investigación, Análisis y Prevención-, porque se le dispararon "las alarmas" cuando comprobó que tenían una relación de "connivencia muy elevada e incondicional" con De Alfonso.

    Masià ha anunciado que no se plantea nombrar a los sustitutos de estos cuatro cargos destituidos, ya que considera que tendrá que ser el nuevo director quien lo haga, por lo que ha apremiado al Parlament a designar al nuevo responsable de Antifraude.

    En la comparecencia, los grupos de la oposición han acorralado a Masià, le han recriminado la "purga" que está aplicando en su etapa como interina y, a excepción de Junts per Sí, han cuestionado su independencia, hasta el punto de que C's, PSC y PP han advertido de que no reúne el perfil idóneo para el cargo, mientras que CSQP y la CUP incluso han pedido su dimisión inmediata.

    Ante la insistencia de los grupos para que se posicionara sobre la actuación de De Alfonso -que fue destituido por el Parlament tras divulgarse sus conversaciones con el ministro en funciones de Interior, Jorge Fernández Díaz, buscando pruebas contra partidos soberanistas-, Masià ha afirmado que pensaba como la mayoría de la cámara: "Estoy en desacuerdo con lo que hizo este señor".

    Masià ha alegado que nunca tuvo conocimiento de lo que hacía De Alfonso y ha aclarado que no le apoyó una vez que se divulgaron las conversaciones, pese a que el exdirector de Anfifraude afirmó en el Parlament que había contado con el apoyo de su cúpula.

    "Todos tenemos claro que era una actuación personal, que no arrastra a ninguna otra persona de la OAC, y menos al organismo", ha alegado Masià, que ha desvelado que algunos miembros del ente le plantearon a De Alfonso que dimitiera al destaparse el escándalo.

    Los portavoces de los grupos, a excepción de JxSí, se han lanzado contra Masià, al considerar que no está preparada para el cargo de adjunta y no es imparcial debido a su pasado político en CDC.

    Inés Arrimadas (C's) ha cuestionado la capacidad de Masià para ser "firme, imparcial y objetiva" en las investigaciones que afecten a Convergencia, ya que fue un "relevante miembro del 'pinyol' (el núcleo dirigente del partido)", hasta el punto que su nombre aparece en el sumario de las ITV como una persona próxima a Oriol Pujol.

    "Nunca estuvimos de acuerdo con su nombramiento, no ahora como interina, sino como adjunta. Sólo hay que repasar su currículum, lleno de cargos de partido, una relación intensísima con la cúpula y el 'pinyol' de CDC. Usted no tenía la experiencia adecuada para la directora adjunta, no cumple con el requisito de imparcialidad y objetividad que corresponde a un cargo así", ha señalado.

    También Jordi Terrades (PSC) ha cuestionado la labor de Masià, aunque en su caso ha dirigido sus críticas al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, al que ha apremiado para que plantee en el Parlament -como es preceptivo- el nombre de un sustituto para no prolongar el período de provisionalidad en la OAC.

    Lluís Rabell (CSQP) ha sido todavía más crítico, al denunciar la "purga" que está llevando a cabo Masià. "Si le dan más tiempo, al final no sé si quedará alguien aparte de usted", ha indicado el diputado, que ha exigido su dimisión para que se pueda nombrar a un director "de reconocida autoridad moral y ética".

    Desde el PPC, Esperanza García ha remarcado que a Masià le falta "idoneidad" para el cargo, ya que no goza de la "ejemplaridad" suficiente porque, entre otros puntos, aparece es el sumario de las ITV por sus relaciones con Oriol Pujol, a lo que la directora en funciones ha replicado que no sabe nada de este caso, ya que ni siquiera la han citado como testigo.

    También Anna Gabriel (CUP) ha pedido "por dignidad" la dimisión inmediata de Masià, ya que entiende que no reúne las condiciones de "idoneidad, independencia y capacidad" para el cargo. "Al frente de la OAC debe haber las mejores personas, las mejor preparadas, las más honestas, las que no tienen precio, las que ningún cheque logrará doblegar su dignidad", ha enfatizado.

    Masià ha evitado responder a las peticiones de dimisión y se ha limitado a afirmar que es habitual en Antifraude que quienes militan en un partido rompan el carné cuando ingresan en el organismo, como "muestra de tener un comportamiento ético correcto".