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Avances en los análisis del cabello permiten detectar denuncias falsas



    Madrid, 14 jun (EFE).- Los avances en los análisis del cabello permiten detectar el nivel de consumo de drogas a lo largo del tiempo y hasta detectar denuncias falsas, según se ha puesto de manifiesto hoy en el I Curso de Toxicología Forense organizado por el Instituto Nacional de Toxicología.

    El curso lo han impartido las expertas en toxicología María Antonia Martínez y Carmen Jurado y ha estado orientado a abordar las novedades en los análisis en relación a las muestras, los tóxicos y los instrumentos analíticos para obtener unos resultados científicamente indiscutibles y legalmente defendibles ante los tribunales, según informa el Ministerio de Justicia.

    Jurado ha centrado su exposición en los análisis de cabello en la toxicología forense, que aportan, ha dicho, información adicional a los de sangre y orina.

    La gran estabilidad de las distintas sustancias en las muestras de pelo permite obtener información sobre periodos de tiempo muy prolongados, desde días a años, con la única limitación de la longitud del mechón.

    El análisis de una muestra de pelo indica los niveles de consumo de sustancias por parte de la persona a lo largo del tiempo, puesto que el cabello crece de media un centímetro por mes.

    El análisis de drogas en cabello permite esclarecer así los hechos en los casos de la denominada sumisión química o crímenes cometidos bajo la influencia de sustancias que afectan a la capacidad cognitiva.

    En estos casos el pelo es especialmente útil cuando la denuncia se hace tarde y ya no se dispone de muestras de orina que acrediten las sustancias administradas a la víctima.

    El análisis del cabello permite además diferenciar el consumo único o puntual del consumo crónico, información determinante para detectar denuncias falsas.

    También sirve para cuando el cuerpo de la víctima está en avanzado estado de putrefacción y no se pueden obtener otras muestras biológicas, ya que permite detectar la causa y etiología de la muerte, tanto en casos de sobredosis como en los de fallo multiorgánico debido al consumo crónico de una sustancia.

    La doctora Jurado ha explicado que "el cabello, además, permite verificar el seguimiento de los programas de desintoxicación por toxicómanos; el consumo de los internos en prisiones; la exposición a sustancias tóxicas de un feto in utero a través del estudio del pelo del recién nacido y el consumo crónico de drogas en casos de divorcio y atribución de la custodia de los hijos".