Ordenan el ingreso en prisión de dos detenidos en el alijo de cocaína en alta mar
Estos dos detenidos, uno de ellos, de nacionalidad venezolana, que fue arrestado en el aeropuerto de Santiago de Compostela cuando iba a coger un vuelo a su país, se han negado a declarar en comisaría y ante la juez, ante quien seguirán compareciendo los restantes detenidos entre esta tarde y mañana.
En el marco de la operación Albatros, en el que han participado más de un centenar de agentes, han sido detenidos cinco personas en alta mar, el patrón del pesquero "Riptide", de nacionalidad coreana, y el resto de la tripulación, de nacionalidad indonesia, y los otros en distintas localidades gallegas.
El pesquero apresado a medio camino entre Venezuela y las Azores está siendo remolcado por la embarcación "Petrel", del Servicio de Vigilancia Aduanera, y podría llegar al puerto de Vigo en el plazo de una semana o diez días, informaron a Efe fuentes de la investigación.
El abordaje se produjo durante la madrugada del 29 de mayo pero la operación continuó en tierra en la jornada de ayer, y se precipitó por la urgencia de detener a uno de los responsables de la organización, enlace de la red exportadora de la droga en España y que tenía un vuelo previsto a Caracas.
Además de los cinco detenidos en el barco, otras 16 personas fueron arrestadas en la provincia de Pontevedra (Vigo, Oia y la comarca del Salnés), así como Ourense, gracias a un dispositivo policial coordinado por Greco-Galicia, de la Comisaría General de la Policía Judicial y la UDYCO de la jefatura de Galicia.
Entre los 21 detenidos figura el representante de la organización venezolana en España y el grupo gallego encargado de coordinar la entrega de la droga.
En el dispositivo han participado más de cien agentes de los GOES, la UPR, la UIP, la UDEV de la Comisaría de Vigo, del Servicio Aéreo policial y especialistas de la Policía Científica.
En total se han practicado diez registros en lo que se han intervenido dos armas de fuego reales, otra de balines y una simulada; ordenadores, teléfonos móviles, anotaciones relacionadas con embarcaciones, unos cinco mil euros en efectivo y varios vehículos.
La Policía subraya que la operación permanece abierta y no se descartan nuevas detenciones.