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La Fiscalía pide tres años de cárcel para un hombre por matar, por una imprudencia grave, a un mendigo
OVIEDO, 22 (EUROPA PRESS)
La vista comenzará el próximo martes 29 de enero de 2013 en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Asturias, con sede en Oviedo, a las 10.00 horas, según ha informado la Fiscalía.
El Ministerio Público sostiene que, el 10 de septiembre de 2010, en un momento no determinado pero anterior y próximo a las once y media de la noche, el acusado y la víctima, Carlos Gueimonde Rodríguez, de 54 años, se encontraban en la primera planta de una casa abandonada en la calle Fray Paulino Álvarez de Mieres.
En un momento dado, se inició una discusión entre ambos, en cuyo transcurso el acusado propinó a la víctima un golpe en una parte no precisada del cuerpo con una cachaba de bambú que tenía una pieza de metal en el extremo. Carlos Gueimonde se desplomó y quedó tendido en el suelo, inconsciente, sangrando.
Según el escrito de la fisclía, el acusado intentó reanimarlo durante unos minutos, sin conseguirlo. A continuación, creyendo que la víctima había fallecido, descendió a la planta baja y prendió fuego con un mechero a un montón de basura (madera, papeles, plásticos y otros materiales), acumulada en el interior de casa, junto a la puerta de la calle.
Seguidamente abandonó el lugar, mientras el fuego se extendía por el inmueble, originando un incendio de notables dimensiones, para cuya extinción intervino Bomberos de Asturias. Las llamas no lograron sofocarse hasta las tres y media de la mañana del día siguiente.
A consecuencia del fuego se generó monóxido de carbono, en tal cantidad, que su inhalación provocó el fallecimiento de Carlos Gueimonde. Igualmente se produjeron desperfectos de gran magnitud en el inmueble. Los gastos de extinción ascendieron a 2.720,90 euros. Tanto el propietario de la casa como Bomberos de Asturias han manifestado su voluntad de no reclamar las correspondientes indemnizaciones. El edificio en el que ocurrieron los hechos se encuentra a suficiente distancia de zonas habitadas, motivo por el que no existió riesgo de propagación del fuego a éstas.
Denunciada la desaparición de Carlos Gueimonde, se iniciaron las oportunas investigaciones, que culminaron con el desescombro del inmueble y el hallazgo de los restos mortales del hombre, el 23 de febrero de 2011.
Carlos Gueimonde se dedicaba a la mendicidad, y vivía en situación de indigencia. Su pariente más cercana es su madre. Se conoce además la existencia de un hermano, con el que no consta que el fallecido mantuviese relación familiar.
El acusado presenta una oligofrenia leve y alteración conductual importante por trastorno de la personalidad, con posible disminución muy leve de la imputabilidad. Además de la pena de prisión y localización permanente, la Fiscalía solicita que se condene al acusado a que indemnice con 70.500 euros a la madre del fallecido.