Intervenidos 500 kilos de hachís a una organización que actuaba en Barcelona y Girona
Según informa la Policía Nacional, los presuntos narcotraficantes trasladaban la droga desde Marruecos hasta el municipio barcelonés de Vilafranca del Penedès, donde la almacenaban en vehículos que funcionaban como zulos.
La distribución tenía como destino la provincia de Barcelona y la de Girona, en este último caso fundamentalmente la zona turística de la Costa Brava.
La investigación, que se inició el pasado mayo, ha derivado en la detención de once personas y en la aprehensión de 500 kilos de hachís, 55.000 euros, 10 vehículos y material para tratar la droga.
El origen de la operación fue la información recibida por agentes de la comisaría de Sant Feliu de Guíxols de que un grupo de personas de origen marroquí se dedicaban presuntamente al tráfico de estupefacientes.
Las primeras gestiones dirigieron a la policía a la localidad barcelonesa de Martorell, donde se detuvo a cuatro hombres a los que se intervino 60 kilos de hachís dispuestos en 'bellotas' que transportaban en dos turismo, además de 6.000 euros en efectivo.
Posteriormente, otras cinco personas fueron detenidas en Sant Feliu de Guíxols por venta de la droga a pequeña escala, tras lo que se inició la búsqueda de los responsable del aprovisionamiento y almacenaje del material.
La operación ha concluido con su detención, que ha abortado la distribución estival del hachís en diferentes localidades de Barcelona y la Costa Brava, según las mismas fuentes.
A los detenidos se les imputan delitos contra la salud pública y de pertenencia a organización criminal, por lo que fueron puestos a disposición de la autoridad judicial, que decretó su ingreso provisional en prisión.