Gonzalo Moliner asume hoy la presidencia del Supremo y del Poder Judicial
La toma de posesión de Moliner tendrá lugar en el salón de plenos del Supremo a las 13.30 horas, después de que el magistrado haya jurado o prometido antes su cargo ante el rey.
Su llegada a la presidencia del TS y del Consejo General del Poder Judicial marcará un nuevo tiempo en el CGPJ tras la crisis que desencadenó el escándalo de los viajes en fin de semana de su antecesor, Carlos Dívar, que dimitió el pasado 21 de junio.
Con su elección, acaba además con la interinidad de los sucesores de Dívar en ambos órganos, la de Fernando de Rosa en el Poder Judicial y la de Juan Antonio Xiol en el Supremo.
Un mes después de la dimisión de Dívar, el Consejo eligió la semana pasada a Moliner como presidente tras haberlo intentado en otras dos reuniones anteriores.
Y lo hizo por 12 votos a favor, 5 en contra y tres abstenciones, y lo hizo por primera vez sin intervención ni propuestas de los grupos políticos.
El procedimiento del CGPJ para elegir a su presidente fue criticado duramente por la sala de lo contencioso-administrativo del Supremo, que considera que ha sometido a "público escrutinio" los nombres de magistrados en el mismo sin consultarles previamente.
La Sala Tercera del TS, la más numerosa del alto tribunal, también lamentaba que la situación de crisis institucional que ha padecido el Consejo "haya podido inducir a confusión entre dicho órgano constitucional y el Poder Judicial, que encarnan sólo jueces y magistrados y cuya cúspide es el Tribunal Supremo".
No obstante, manifestaba su apoyo y confianza al magistrado Gonzalo Moliner, aunque lamentaba que durante las reuniones que mantuvo el Consejo se hayan sometido a votación o a debate los nombres de magistrados que integran esta sala, "que o bien no habían sido consultados previamente o bien no habían mostrado su interés por presidirlo".
A este respecto, la vocal Margarita Robles ha respondido que, "si ha habido errores o aciertos" en la elección Moliner, éstos son de los propios vocales, puesto que el proceso se ha llevado a cabo "sin injerencias externas".