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Uno de cada cinco españoles, a favor de la pena de muerte



    Madrid, 16 mar (EFE).- Casi tres de cada cuatro españoles se muestran partidarios de la cadena perpetua y uno de cada cinco de la pena de muerte para los delitos especialmente graves, según el último Índice de Opinión Pública (IOP) de Simple Lógica, socio de Gallup en España, realizado entre más de mil personas.

    Así, el 73 % de los encuestados manifiesta estar a favor de la aplicación de la cadena perpetua y el 20,6 % es partidario de la pena de muerte en el supuesto de estos delitos de especial gravedad.

    La proporción de partidarios de la aplicación de penas de cadena perpetua es algo superior entre los hombres, entre los encuestados de edades medias de 45 a 64 años, entre quienes tienen estudios primarios y entre los ciudadanos de clase media.

    Si se atiende a la orientación política de los entrevistados se observa que entre los votantes del PSOE la proporción de partidarios de este tipo de condena es claramente inferior a la que se registra entre los del PP, aunque en ambos colectivos suponen una clara mayoría.

    El porcentaje de quienes se muestran a favor de la aplicación de la pena de muerte es claramente superior entre los hombres (23,2 %) que entre las mujeres (18,0 %) y también superior entre los más jóvenes con respecto a los de mayor edad.

    Quienes tienen de 16 a 24 años representan un 27,5 % de los partidarios de esta pena mientras que en los mayores de 65 ese porcentaje se reduce a la mitad y se queda en el 13,2 %.

    También es menor la presencia de partidarios de la pena capital a medida que se eleva el nivel de estudios o el estatus social de los interpelados, situándose en el 13,2 % y el 17,2 %, respectivamente, entre los individuos con estudios universitarios y de clase social alta o media alta, mientras que asciende al 23,9 % entre quienes tienen estudios primarios o un nivel inferior y al 22,1 % entre los de clase media-baja o baja.

    La diferencia de posicionamiento es también clara entre los votantes del PSOE y del PP, pues mientras entre los socialistas representan un 16,3 % los partidarios de la pena de muerte, entre los populares suponen un 23,0%.

    Seis de cada diez ciudadanos (60,4 %) consideran que el objetivo prioritario de las penas de cárcel es el castigo de los delincuentes, frente a casi uno de cada tres (32,2 %) que representan los que señalan que el objetivo debe ser la reeducación y reinserción social como señala el actual ordenamiento jurídico.

    Entre las mujeres se eleva la proporción de quienes señalan la dimensión punitiva como objetivo de las penas de cárcel, así como entre los entrevistados de más edad.

    También se eleva el porcentaje de quienes señalan la función de castigo de los delincuentes a medida que desciende el nivel de estudios y el estatus social de los informantes, situándose la proporción de quienes sostienen esa opinión en el 67,6 % entre los que tienen estudios primarios o un nivel inferior de instrucción y en el 67,5 % entre los de clase social media-baja o baja.

    Asimismo, mientras entre los votantes del PP representan un 25,1 % los que señalan como objetivo prioritario de las penas de cárcel la reeducación y reinserción social de los delincuentes, entre los votantes del PSOE el porcentaje de quienes sostienen la misma opinión es once puntos superior (36,9 %).

    La mayoría de los españoles, dos de cada tres, consideran que las penas que se aplican en España por los delitos son menos duras que las de los países europeos.

    Una percepción que es superior entre las mujeres (70,4 %) que entre los hombres (62,5 %) y que se eleva a medida que desciende la edad de los encuestados, de forma que mientras entre los mayores de 65 años representan un 60 % los que consideran que las penas en España son menos duras, entre quienes tienen de 16 a 24 años ese porcentaje se eleva al 82,6 %.

    También es inferior la proporción de los que sostienen esa opinión a media que se eleva el nivel de formación y estatus social, hasta situarse en el 56,8 % entre quienes tienen estudios universitarios y el 57,2 % entre los informantes de clase alta o media-alta.

    Los votantes del PP representan un 74,4 % entre quienes consideran que las penas en España son menos duras y, entre los del PSOE, el porcentaje es casi diez puntos inferior (64,7 %).