La mujer de Santos Cerdán lo visita en prisión por primera vez y se encara con la prensa: "¡Más respeto!"

El número tres de Pedro Sánchez ingresó en Soto del Real el pasado lunes 30 por orden del juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente, que ha decretado prisión provisional, comunicada y sin fianza para Santos Cerdán, exsecretario de Organización del PSOE, en el marco del denominado caso Koldo. El riesgo de fuga o la destrucción de pruebas han motivado la medida, dado que se le imputan delitos de integración en organización criminal, cohecho y tráfico de influencias tras los informes de la UCO que le atribuyen gestionar comisiones irregulares por valor de alrededor de 620.000 euros. Este viernes, el político ha recibido la primera visita familiar: su mujer, Paqui Muñoz, y su hermana.

Se mostraban nerviosas y cabizbajas a su llegada a la cárcel madrileña, donde Santos Cerdán ya comparte patio con Luis Bárcenas. La mujer, Paqui, ha protagonizado un momento muy tenso con la prensa (y ya van dos): "Por favor, más respeto", ha pedido elevando la voz ante las primeras preguntas acerca de la detención de su marido. Mejores formas ha tenido su cuñada, que ha defendido la inocencia de su hermano: "Estamos muy tranquilos". Y ha añadido: "Debe de estar muy solo ahí dentro".

El nerviosismo era tal que se han equivocado de puerta de dos veces. Una vez dentro de la prisión, han pasado por todos los protocolos establecidos: presentar el libro de familia, padrón y entregar el teléfono móvil, entre otras cosas. La visita, que este viernes y hasta que se apruebe la petición de 'vis a vis' se lleva a cabo cristal mediante, ha tenido lugar a las cinco de la tarde y se ha extendido 40 minutos. Paqui llevaba una mochila con los enseres personales de su marido. Poco después llegaba el abogado del ex secretario, Jacobo Teijeilo, a quien tampoco le hacía demasiada gracia la presencia de los medios: "No seáis pesados, coño...".

Santos Cerdán lleva ya cuatro días en prisión, casi 100 horas que se han hecho eternas y que ha pasado "jugando a las cartas" y "charlando" con otros reclusos, tal y como ha desvelado el familiar de uno de ellos: "Está de bajón pero está tranquilo, todos le hacen la pelota. Ellos ven un político y van a buscarle amistad". Y ha desvelado, además, que los horarios se han visto ligeramente modificados con la llegada de Cerdán: "Ahora los encierran más pronto por él".