Novedades tras la muerte de Mayra Gómez Kemp: del motivo del fallecimiento al último adiós

La mítica presentadora del Un, dos, tres... falleció el pasado domingo, 13 de octubre, a los 76 años, y las causas de la muerte todavía son un misterio. Todo apunta a que sufrió un derrame cerebral. Así lo desvela El Mundo, que añade también que Mayra Gómez Kemp fue traslada en estado muy grave a la Clínica de la Concepción de Madrid, donde ya no pudieron hacer nada por su vida. Investigan ahora si el trágico final de la artista cubana está relacionado con una caída que sufrió pocos días antes en su domicilio y por la que permaneció inconsciente en el suelo durante 18 horas. Fue rescatada por los bomberos tras el aviso de una vecina y tras pasar unos días en observación, fue dada de alta.

Su cuerpo todavía permanece en el Instituto Anatómico Forense a la espera de ser reclamado por sus familiares más directos, que viajan desde Sudamérica. Este martes ha aterrizado en la capital Roxana, su hijastra, que ha dado los primeros datos sobre el funeral de la cantante: "Estoy tratando de resolver cómo hacer todo, cuando tenga algo que decirles, os juro que os los voy a decir para que todos puedan hacer lo que tengan que hacer, pero todavía no puedo porque no hay nada que decir", ha dicho a su llegada.

La hija de Alberto Berco, el gran amor de Gómez Kemp, ha adelantado que se abrirá una capilla ardiente para que todos los que querían a Mayra puedan darle un último adiós aunque será muy breve: "Una ahora va a ser, nada más. Ella no quería". También habrá homenajes, pero será más adelante: "Habrá de todo pero posteriormente, no lo voy a organizar yo". Y añadía: "Todo el mundo la ama, yo también. La verdad es que quisiera satisfacer a todos, pero no puedo".

Mayra vivía sola desde que enviudó. Alberto sufrió un infarto en plena pandemia y murió en los brazos de su mujer, que nunca superó su muerte: "Mientras se estaba quitando el pijama, se me fue y no se movió más. No se dio cuenta y eso es algo que me reconforta", dijo. Sus amigos trataban de cuidarla y hacerle compañía pero aseguran que ella los rechazaba: "Era muy difícil sacarla de casa, sacarla a pasear. Se encerró", han asegurado ahora.