La vida de Villar Mir: de sus conexiones con la Casa Real a su amistad con Florentino Pérez

Juan Miguel Villar Mir, el fundador y presidente de honor de Grupo Villar Mir (GVM) ha fallecido a los 92 años de edad. El empresario trasciende como protagonista clave en el desarrollo de España en los últimos 50 años. Sin embargo, discreto de carácter e imagen, la personalidad va mucho más allá: de ser uno de los empresarios más importantes de la economía española a sus conexiones con la Casa Real.

Casado con Silvia de Fuentes y padre de tres hijos (Juan, Silvia y Álvaro), Mir mantuvo grandes lazos con los reyes. Fue vicepresidente económico y ministro de Hacienda en el primer Gobierno de la Monarquía, en tiempos del Rey Emérito, pero apenas logró permanecer en el cargo seis meses. Es ahí, cuando el empresario comienza a fraguar un amistad con el entonces rey Juan Carlos I y el germen de sus lazos con la Casa Real.

Les unió su visión por España, de la Monarquía y su afición a navegar por aguas baleares con sus lujosos yates. Una amistad que prolongarían años mas tarde sus hijos, pues su hija menor y también la más reconocida, Silvia, se convirtió en íntima de las infantas. Sin embargo, su vínculo comenzaría antes de lo que creían.

Su hija Silvia se casó con el también empresario Javier López Madrid en septiembre de 1990 en Sotogrande, quien conoció a Felipe VI en el colegio Santa María de los Rosales desde tiempos de EGB y terminó por ser considerado el 'compi yogui' de la reina Letizia. Más aún, durante el noviazgo de los entonces príncipes, López Madrid alojó en varias ocasiones a los actuales monarcas. Así, Letizia hizo muy buenas migas con Silvia Villar Mir, a cuyo domicilio acudía para hacer yoga con la hija del empresario. Incluso, cuando el hermano de López Madrid falleció, pudimos ver a las Infantas apoyar a Silvia y el empresario en el mismo funeral.

Aunque más allá de los vínculos entre la hija del empresario con los monarcas, el propio Juan Miguel mantenía cierta confianza con la realeza. El empresario estuvo envuelto en diversos casos de corrupción, ligados a los escándalos del PP madrileño: los papeles de Bárcenas, el caso Púbica, el caso Lezo, donde contó con el apoyo directo de los reyes.

Más aún, sus negocios también lo ligaron a la Casa Real. De las múltiples fundaciones en las que tenía participaciones, forma parte, a través de la Fundación Villar Mir del patronato de la Fundación Princesa de Asturias, presidida en la actualidad por la princesa Leonor.

Claro que, su gran poder económico también lo relacionaría con otros ilustres de la alta fortuna. Su impero de la construcción le hizo competir con otra de las entidades más poderosas: ACS, propiedad de Florentino Pérez, con quien terminó por mantener una estrecha relación de amistad.