De las discotecas de Zaragoza a los platos de pulpo en Marín: así se diverte la princesa Leonor en su nueva etapa

Los últimos años de la princesa Leonor están siendo determinantes en su formación y en su futuro reinado. Si la vida le dio un vuelco hace tres años cuando puso rumbo a Gales para estudiar Bachillerato Internacional, el año pasado dio otro paso importante al formarse en Zaragoza como militar. Algo que sigue haciendo con gran entrega en Marín, Pontevedra, donde desde finales de agosto completa la segunda etapa de su instrucción, muy iluisionada.

Algo que también le permite conocer a nuevos compañeros y compañeras y disfrutar con ellos del tiempo de ocio del que disponen. Fuera de la Esceula Naval, este domingo estuvo almorzando con sus compañeros en La cantina del muelle, conocido restaurante del municipio, tal y como recoge la revista Hola.

Un total de 40 personas fueron las que estuvieron en este almuerzo. El restaurante cerró para Leonor y sus amigos guardiamarines y les ofreció un menú de 36 euros que incluía auténticas delicias para el paladar: pulpo, merluza ahumada, pimientos asados a las finas hierbas, vieiras al albariño con champiñones y fiuncho (una planta aromática), jarrete en arroz, seis tipos de queso, jamón ibérico, lomo de orza, salpicón de rape y camarones.

Las torrijas de la Cantina (fritas sin huevo y sin aceite, pero con helado) conformaron el postre. La princesa y sus acompañantes no dejaron nada en los platos.

Otro de los lugares que Leonor y sus compañeros han visitado recientemente es la tapería D'Elvi, que se encuentra en los alrededores de la playa de Meira, un enclave único. Leonor ya suma estos dos locales a su nueva guía de ocio particular.

Ya en su anterior etapa en Zaragoza la vimos disfrutar de planes gastronómicos parecidos a estos. También de algunos otros más animados en discotecas como Parros o Babia. En la hamburguesería Panzzer Grill o en Murray's Tavern también compartió grandes momentos. Momentos únicos que vivió con amigos y amigas que conserva, al igual que las grandes amistades que cosechó en Gales y con las que disfrutó a bordo de un barco este verano por Cabrera.