Global
Assange habla de una "nueva alianza cultural" en una cumbre de periodismo
El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, aseguró hoy que en el mundo crece una "nueva alianza cultural" que hará frente al "statu quo" impuesto por las grandes potencias, y que apuesta por un nuevo orden en el planeta. Julian Assange: "Si dejo la embajada, correré el riesgo de ser arrestado y extraditado a EEUU"
Esa "nueva alianza" está, sobre todo, integrada por jóvenes y gobiernos progresistas, dijo Assange al participar, por videoconferencia, en la última charla de la I Cumbre para un Periodismo Responsable, organizada por el Gobierno de Ecuador en la ciudad de Guayaquil.
"Esta nueva alianza cultural esta creciendo y creciendo", señaló Assange desde la embajada ecuatoriana en Londres, donde se encuentra desde hace un año a la espera de que el Gobierno británico le conceda un salvoconducto para poder abandonar el Reino Unido, en goce del asilo político otorgado por Ecuador.
Según el activista australiano, hay mucha gente joven y talentosa que está "entrando en esta alianza" y muestra de ello son personas como el soldado Bradley Manning y Edward Snowden, acusados de filtrar información clasificada de Estados Unidos.
Para Assange, el mundo está dominado por un "centro de poder" liderado por EEUU, que cuenta con instituciones, como la Agencia Central de Inteligencia (CIA), que ha emprendido una batalla por controlar la información en todo el planeta.
No obstante, este tipo de instituciones como "la CIA o la Agencia de Seguridad Nacional", entre otras, tienen la necesidad de "contratar gente joven" y ésta tiene nuevos valores como la solidaridad y la justicia, añadió.
"La gente joven está penetrando en estas antiguas y corruptas instituciones y las están disciplinando", apuntó el fundador de WikiLeaks en su videoconferencia magistral seguida por otros expertos internacionales, autoridades y estudiantes universitarios que asistieron al encuentro que empezó ayer, miércoles.
Para Assange, la comunicación es un derecho que prevalece sobre otros, pero que puede convertirse en un instrumento de manipulación.
"Cada persona es igual en su derecho a comunicarse", pero la base de ese principio es, sobre todo, "el derecho de quien escucha" y quien requiere "conocer la información que lo va a ayudar", apostilló el también periodista australiano, apoyado por una traductora.