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La UE plantea test de estrés a las centrales nucleares: ¿debe Europa revisar sus planes energéticos?

    La alarma de las centrales japoneses 'enciende' el debate nuclear en Europa. Foto: Archivo.


    La alarma en las centrales japonesas extiende el debate nuclear por toda Europa, y ya con las primeras consecuencias. El lobby antinuclear ha sacado toda su artillería, tras varios años perdiendo terreno en Bruselas ante el lobby pronuclear. El presidente de la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo, el socialista Jo Leinen, ha reclamado que las 143 centrales nucleares en la UE sean sometidas a test de estrés para comprobar si serían capaces de resistir un terremoto como el japonés o un atentado terrorista.

    Se suma así al Gobierno de Austria, uno de los países de la UE tradicionalmente más ferozmente opuesto a este tipo de energía. La Comisión Europea, que reconoce las limitadas competencias del club comunitario en materia nuclear, ha convocado mañana en Bruselas una reunión de ministros y expertos europeos para analizar la situación.

    El comisario europeo de Energía, Guenther Oettinger, también ha señalado que se debe comprobar rigurosamente la seguridad en las centrales más antiguas y no descartó cerrar algunas en caso de que fuese necesario.

    La crisis de las centrales nucleares niponas está reavivando la inquietud acerca de la seguridad de estas las instalaciones en un momento en el que en Europa numerosos países planean nuevas centrales, considerando esta energía como una alternativa limpia al petróleo y el gas y con el argumento de que las nuevas tecnologías deberían aliviar los temores sobre la seguridad de este tipo de instalaciones.

    "Creo que hará que muchos gobiernos, autoridades y otros responsables se lo piensen dos veces antes de planificar centrales en zonas sísmicas", ha comentado Jan Haverkamp, que hace campaña en la Unión Europea para el grupo ecologista Greenpeace, que se opone a nuevos reactores y quiere que los actuales se vayan abandonando progresivamente.

    Suiza y Alemania se replantean sus planes

    Suiza anunció este lunes la suspensión de los proyectos de renovación de sus centrales nucleares, tras las explosiones en Japón en una planta nuclear afectada por el terremoto del pasado viernes. Una decisión que el resto de los países del Viejo Continente contemplan.

    Hoy también se ha conocido que la decisión del Gobierno alemán de suspender la ampliación de la vida de las centrales nucleares durante al menos tres meses. Así lo ha reconocido hoy el ministro de Asuntos Exteriores, Guido Westerwelle.

    La canciller alemana, Angela Merkel, anunció previamente que estaba consultando con expertos nucleares y siguiendo de cerca el accidente de Japón. La fuga radioactiva japonesa llega en un momento difícil para Merkel, cuyo partido conservador afronta tres elecciones regionales en marzo y los temores por la seguridad nuclear pueden ayudar a sus rivales.

    Reino Unido

    En Reino Unido, que estudia un gran programa de construcción nuclear para sustituir a las plantas antiguas, el secretario de Energía, Chris Huhne, señaló el domingo que había pedido al inspector jefe nuclear un informe sobre las implicaciones de la crisis japonesa.

    Comentó que aunque puede haber lecciones sobre la seguridad, Reino Unido tenía reactores diferentes a los japoneses y enfatizó que el país no se encuentra situado en una zona sísmica.

    La diputada ecologista británica Caroline Lucas ha reconocido que el accidente japonés reforzaba la lucha contra la construcción de nuevas centrales nucleares. "Nunca se podrá descartar completamente un error humano, un fallo de diseño o un desastre natural", ha avisado Lucas, cuyo partido respalda la eficiencia energética y las energías renovables para que Reino Unido alcance sus metas energéticas y de cambio climático.

    Walt Patterson, miembro asociado en el grupo de expertos Chatham House de Londres, cree que, aunque la crisis japonesa afectará a la percepción de la opinión pública respecto a la industria nuclear, el daño financiero también podía ser grave.

    Referéndum en Italia

    Italia, uno de los pocos países europeos propensos a terremotos, es el único del Grupo de los Ocho países más industrializados (G8) que no cuenta con plantas nucleares.

    El primer ministro, Silvio Berlusconi, quiere que en el futuro una cuarta parte de la electricidad del país sea nuclear y el líder del partido PDL de Berlusconi en la Cámara Baja ya ha anunciado que Italia no modificaría sus planes por el desastre japonés.

    No obstante, los acontecimientos en Japón van a estar previsiblemente presentes en las mentes de los votantes cuando Italia celebre un referéndum sobre la construcción de plantas nucleares dentro de tres meses.

    Francia, el segundo productor nuclear del mundo después de Estados Unidos, ha apuntado que discutiría posibles medidas de precaución para sus 58 reactores que aportan la mayor parte de su electricidad.

    Salgado: "El debate siempre ha estado ahí"

    En España, el debate ha empezado a tener sus primeras reacciones. La ministra de Economía española, Elena Salgado, consideró hoy que el debate sobre el uso de la energía nuclear en España debe abordarse con una "perspectiva global", sin tomar decisiones basadas únicamente en una "circunstancia concreta", en referencia al terremoto ocurrido en Japón. La vicepresidenta segunda del Gobierno hizo estas declaraciones en Bruselas, preguntada por la emergencia nuclear que vive Japón, tras el terremoto del viernes. "El debate siempre ha estado ahí y esto lo que contribuye es a reforzarlo.

    Pero no deberíamos tomar decisiones basándonos en una circunstancia concreta", explicó Salgado, que viajó a la capital belga para asistir a una reunión de ministros de Finanzas europeos.

    Una alternativa imprescindible

    La imperiosa necesidad de reducir la dependencia del petróleo, gas y carbón, junto con las emisiones de carbono y el calentamiento climático que producen, harán que probablemente no se descarrilen los multimillonarios planes nucleares en Europa.

    "En el calor del momento, animará los llamamientos para poner fin a la generación de energía nuclear, pero cuando pase el tiempo los gobiernos tienen que pensar racionalmente sobre las necesidades de aumento de energía y las emisiones de CO2", ha declarado a Reuters una fuente de la industria francesa, que pidió no ser identificada. "La energía nuclear es un elemento inevitable del mix energético", añadió.

    Otra fuente de la industria gala señala que el accidente nuclear japonés crearía una "prima sobre la seguridad" al mismo tiempo que apoyó la creación de reactores de tercera generación.