Las empresas critican que la RSC sea objeto de regulaciónbarcelona/madrid. Los empresarios han respondido al guante lanzado antes de verano por la Subcomisión creada en el Congreso para estudiar la Responsabilidad Social de las Empresas (RSE). La respuesta casi unánime es que estas políticas de gestión no deben ser objeto de regulación. "Las empresas somos capaces de ir más allá de lo que se propone desde el Congreso pero de manera voluntaria", aseguró Àngel Pes, responsable de Reputación Corporativa de La Caixa. Además de importantes empresas, los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, distintos representantes del empresariado español y directivos se reunieron ayer en Barcelona para analizar las conclusiones del Congreso sobre RSE en unas jornadas organizadas por Esade. La advertencia fue sutil pero directa: poner sobre la mesa la responsabilidad social de las empresas es necesario, pero hacer de ella un imperativo legal es un error en el que el Gobierno puede estar a punto de caer. Los dirigentes de patronales de pymes, elogiadas por su rápida adaptación a la RSE, afirmaron que adaptar "por las buenas o por las malas" la idea que salió del Congreso no funcionará. Por el contrario, "debe ser fruto de un cambio de cultura empresarial y para ello es necesario dialogar y no tanto fijar una norma", concretó Àngel Roca, de la patronal catalana PIMEC. El empresario Carlos Rodríguez, propietario de la compañía Pinter, apuntó a la "mera voluntad" como punto de inicio de la RSE en las empresas. "La responsabilidad social de las empresas debe introducirse mediante convenios colectivos pero no puede convertirse en norma", afirmó por su parte Juan Tapia, responsable de negociación colectiva y responsabilidad social de CCOO, para después añadir: "No se puede imponer por la fuerza, sino que debe ser fruto del consenso y la negociación entre los grupos de intereses que confluyen en cada una de las empresas". Llegado el turno de los diputados involucrados en las conclusiones de la Subcomisión, algunos se desmarcaron dando su parte de razón a las empresas: "Ninguno de los grupos parlamentarios quedamos de acuerdo al cien por cien con las conclusiones pero había que mandar un mensaje a la sociedad", reconoció Eugenio Azpiroz, del PP. Por su parte PSOE y CiU se mostraron convencidos de la importancia de la RSE ya que "redundará en la competitividad de las empresas españolas", recalcó Carlos Campuzano de CiU.Impulsar una reforma legal para introducir la inversión socialmente responsable, promover un marco fiscal favorable para las empresas que incorporen criterios de RSE, regular la elaboración de memorias de sostenibilidad para empresas del Ibex 35 o intensificar la transparencia y buen gobierno de las empresas son algunas de las recomendaciones dadas por la subcomisión del Congreso.