El suburbano propone cuatro rutas verdes en torno a la capitalLa red interurbana Metro de Madrid es uno de los emblemas por antonomasia de la capital y de su carácter metropolitano. Para algunos representa el bullicio y las prisas; para otros, sentirse totalmente en casa. En cualquier caso, y paradójicamente, el icono de la gran ciudad acerca la naturaleza al ciudadano. ¿Cómo? A través de las Rutas Verdes que Metro de Madrid y el Consorcio Regional de Transportes tratan de fomentar con una campaña informativa; cuatro rutas diferentes que alejan al ciudadano de la metrópoli y ponen a su disposición pequeños tesoros escondidos (y otros no tanto) cuya puerta de entrada es la red suburbana. Las cuatro rutas propuestas son Casa de Campo, Madrid Río, Ciudad Universitaria y Parque Juan Carlos I, y en todas tiene un papel predominante la bicicleta -de hecho se inscriben bajo el lema El tranporte público, tu bici, la naturaleza y tú-, aunque no es elemento ineludible. La circular ruta de Casa de Campo, con 15,5 kilómetros, guarda, entre otras sorpresas, el Puente de la Culebra, la puerta del Zarzóno o el arroyo Meaques. La ruta de Ciudad Universitaria arranca en el epicentro del conocimiento de la ciudad para extenderse durante 5,8 km en los que en ningún momento se abandona la calzada o el carril-bici. Una alternativa para abandonar el ajetreo madrileño sin escapar de sus entrañas. En tercer lugar, la ruta de Madrid Río recorre durante 7 kilómetros la vereda del Manzanares sin abandonar tampoco en ningún momento la calzada o el carril-bici por el camino más campestre. Y en cuarto y último lugar, la ruta del Parque Juan Carlos I, una zona relativamente moderna en relación con las ya mencionadas -tan sólo tiene unos 20 años-, llevará al paseante a adentrarse en zonas tan inmejorables como el Parque de El Capricho que, aunque no tan céntrico como El Retiro, posiblemente sí es el más hermoso de la capital madrileña.