El Ejecutivo entregó ayer a las principales asociaciones una parte del borrador del Estatuto El texto exige formalizar contratos por escrito entre el autónomo dependiente y el clientemadrid. El Estatuto del Trabajador Autónomo, una de las principales promesas electorales del presidente José Luis Rodríguez Zapatero, empieza a ser ya una realidad a mitad de la actual legislatura. El Gobierno hizo llegar ayer, a las principales asociaciones del colectivo (UPTA, ATA y CEAT), la primera parte del borrador del Estatuto. En esta primera entrega, el Ejecutivo, por primera vez, reconoce y regula la figura del trabajador autónomo. En España, existen casi tres millones de trabajadores autónomos, de los cuales medio millón (según las propias asociaciones) corresponderían a trabajadores autónomos dependientes (que desarrollan su actividad habitualmente con un único cliente). En esta categoría entran profesiones tan dispares como camioneros, cámaras de televisión, fotógrafos, taxistas, etc.En el documento de los expertos, previo a este borrador, se entendía por trabajador autónomo dependiente a quien presta sus servicios por cuenta propia, que no tenga trabajadores a su servicio y desarrolle su actividad "de forma continuada, coordinada y predominantemente para un sólo cliente del que depende económicamente".El borrador del Ejecutivo aplica la definición a quien realiza una actividad económica o profesional a título lucrativo "y de forma habitual, personal, directa y predominantemente para una persona física o jurídica". En cuanto a la expresión "depender económicamente", el Gobierno cifra, en al menos el 75 por ciento, el porcentaje de ingresos obtenidos de ese cliente por rendimientos de trabajo y de actividades económicas.Contratos por escritoPara evitar posibles fraudes entre la figura del trabajador autónomo dependiente y otras formas de trabajo, el texto del Gobierno obliga a que el contrato entre el trabajador autónomo y su cliente se formalice por escrito (en el texto de los expertos era opcional) y que figure en un registro.Otra novedad del borrador de Trabajo es que el autónomo debe hacer constar expresamente en el contrato su condición de dependiente económicamente respecto del cliente que lo contrate. "La condición de dependiente sólo se podrá ostentar respecto de un único cliente", apunta el texto presentado ayer a las organizaciones más representativas del colectivo.Por otra parte y ya en general, se eliminan las dudas sobre cuál es el marco jurídico en el que se mueven los autónomos (aparece sólo como relación mercantil), y que será la jurisdicción de lo social la que se aplicará en caso de controversia.El Gobierno abre además la puerta al Consejo Estatal del Trabajo Autónomo a las Comunidades Autónomas que lo soliciten, y de la asociación de Entidades Locales "más representativa". La propuesta de texto articulado del Gobierno sobre la protección social y responsabilidad de los autónomos en el ejercicio de sus actividades se conocerá cuando el Ejecutivo vuelva a convocar a ATA, UPTA y CEAT.Estas asociaciones mantienen que se trata de la parte más complicada del Estatuto y que más problemas puede tener para llegar a un consenso, sobre todo en la separación entre patrimonio personal y laboral a efectos de embargabalidad, y la equiparación de los derechos sociales que disfrutan los trabajadores por cuenta ajena, como la jubilación anticipada.El final de una larga historiaEl camino hasta este borrador se inició hace un año, cuando el Gobierno encargó a un grupo de expertos la elaboración de un primer proyecto de Estatuto, presentado el pasado 17 de octubre, y que no satisfizo del todo a las principales organizaciones.El siguiente paso se dio a comienzos de este año, cuando el Ministerio de Trabajo convocó a las citadas organizaciones (las únicas que reconoce para negociar todo lo relativo al sector de los autónomos) a una serie de encuentros periódicos para conocer sus reivindicaciones y ver en qué medida se podían incorporar al texto definitivo. Trabajo se comprometió a responderles con un documento antes de Semana Santa. Y así ha sido. Ayer citó a las organizaciones en la sede del Ministerio para facilitarles este borrador, la primera parte del que se espera que sea ya el texto final.El Ejecutivo ya ha anunciado que entregará muy pronto el resto del borrador, correspondiente a la protección social de los autónomos (como el posible derecho a una pensión o a la jubilación anticipada, las principales reivindicaciones del colectivo) y la política de fomento de esta actividad.