Fútbol

Iker Casillas: una gran parada y un gran fallo en su debut europeo con el Oporto

    Error clave: Buyalskyy anotó ante la salida en falso. <i>Imagen</i>: Reuters

    Javier Martín

    Iker Casillas, portero del Oporto, debutó ayer con los portugueses en la Champions League, competición en la que ya es, junto con Xavi, el hombre que más veces la ha disputado. Ante el Dynamo de Kiev (2-2), el español tuvo una actuación irregular. En la primera mitad protagonizó una gran parada, pero en la segunda cometió un fallo en el gol que cerró el resultado definitivo.

    Sombras y luces que dejaron al guardameta descontento. Al final del encuentro Casillas enfiló el túnel de vestuarios con cara de pocos amigos. No parecía contento con su actuación.

    Y eso que al descanso, todo eran alabanzas por cómo había evitado que el Oporto fuera perdiendo por 2-1, un resultado que habría puesto complicada la remontada para la segunda mitad.

    Fue una mano a Denís Garmash la que evitó el segundo gol local en los primeros 45 minutos. Un balón centrado desde la banda izquierda acabó en los pies de este mediocampista ucraniano que remató a bote pronto. La bola parecía colarse en la meta cuando Iker voló para despejar el esférico a córner. Es la típica parada que tantas veces ha repetido con la camiseta del Real Madrid, cargada de reflejos y velocidad.

    Sin embargo, otra acción repetida en Madrid fue la que le condenó cuando el partido estaba a punto de finalizar. Casillas volvió a dudar en una salida. Su tendencia a permanecer bajo palos puso en bandeja a Vitali Buyalskyy el 2-2 en el minuto 89.

    El mediocentro remató en el corazón del área pequeña un balón colgado desde el costado izquierdo y en el que el fuera de juego posicional de un compañero despistó a la zaga contraria y al mismo Casillas. Cuando el arquero quiso tomar la iniciativa y adelantarse al balón, Buyalskyy ya había conectado el remate con el que marcó el tanto del empate.