El fichaje frustrado de De Gea por el Real Madrid y la paradoja de Iker Casillas

Iker Casillas compareció este lunes de nuevo por Madrid. Lo hizo en un centro comercial de Leganés saturado por los jóvenes fans que, aclamándolo, no dejaban hablar al portero del Oporto. "Soy feliz", dijo entre la multitud. Su sonrisa delataba que sí, que lo es. Que ya ha dejado atrás un periodo oscuro de su vida en el que se sintió menospreciado en su propia casa. La salida del Real Madrid le ha permitido relajar el gesto para ser de nuevo el de siempre y encontrarse con una inesperada paradoja en forma de 'venganza' contra el club blanco y su mayor enemigo en la portería de la Selección española. El no 'fichaje' de De Gea por el equipo del que fue capitán le deja como vencedor de toda la revolución generada en torno a la meta del Santiago Bernabéu.

Ni siquiera Keylor Navas se puede decir que haya ganado más que Iker Casillas. Sí, el costarricense se ha asegurado la titularidad del equipo blanco, pero lo ha hecho a cambio de saber que su club prefería a otro para ocupar su puesto. Tanto es así que ayer Florentino Pérez se desplazó a Valdebebas para verse con Keylor y pedirle perdón, al tiempo que su representante pidió que ese perdón cristalizase en forma de mejora de emolumentos. El Real Madrid estudiará la propuesta.

Al mismo tiempo que se producía este encuentro, Iker Casillas se preparaba para la sesión de entrenamiento en la que se reencontraría con De Gea. Lo hará en una posición completamenta distinta a la última ocasión en la que uno y otro volvieron a enfundarse la ropa de entreno de 'La Roja'. Entonces, por el mes de junio, el portero del United se las prometía felices. Su futurible llegada al Madrid le aseguraría la titularidad de cara a la Eurocopa mientras que la salida de Iker no sólo le apartaba de su equipo, sino que ratificaba su condición de suplente en la vigente campeona de Europa.

Pero la operación De Gea se ha ido al traste y eso ha provocado que el toledano no las tenga todas consigo para ser el titular del Manchester y, por lo tanto, para ir si quiera convocado con España a la cita de Francia.

Dice Del Bosque que si no juega, es complicado que pueda ocupar la portería. Lo haría, así pues, un Iker Casillas que ha ganado protagonismo sin casi quererlo. La lógica dice que De Gea volverá a jugar en el United... siempre y cuando renueve con los 'diablos rojos'.

La tozudez de Van Gaal durante estas semanas ha demostrado que no lo alineará a menos que se reenganche al proyecto de Old Trafford. De Gea no lo tiene claro y si se decidiera a esperar un año para irse al Real Madrid, se arriesgaría a acabar en el banquillo de su equipo y por extensión, al de España.

Casillas sería, por tanto, el titular para la Eurocopa, un panorama hasta hace poco impensable que se une a la tranquilidad que vive en Portugal para dibujar tan singular paradoja. Nadie diría cuando abandonaba entre lágrimas el Santiago Bernabéu que él sería quien saldría ganando más de todos los implicados en su marcha al Oporto.