Fútbol

Simeone intenta reinventar al Atlético para sacarle de su bache de resultados

    Koke fue ayer la sorpresa al jugar de mediocentro. <i>Imagen</i>: EFE

    Javier Martín

    El Atlético de Madrid pasó ayer a cuartos de final de la Champions League y lo hizo con sufrimiento. El equipo colchonero tuvo que recurrir a los penaltis para tumbar al Bayer Leverkusen después de que en 120 minutos de juego sólo lograse igualar el 1-0 de la ida. Un resultado que llegó previa revolución en el once rojiblanco. Diego Pablo Simeone trató de reinventar su sistema para sacar al equipo del bache de resultados en el que se encuentra.

    Lo hizo mediante la vía de la excelencia y los cambios de posiciones. Esto es, usó a Mario Suárez y Koke (habitualmente interior derecho) como pareja de medioscentros. Por la derecha colocó a un anoche genial Arda Turan y por la izquierda, a Cani (debutó como titular). Cuatro jugones para tener más la pelota y generar más fútbol del que crea habitualmente el equipo colchonero.

    Además, el argentino reforzó los laterales con la presencia de Juanfran y Gámez (novedad). Sus subidas sirvieron de apoyo constante a los mediocampistas y solventaro el problema del lateral izquierdo, donde Siqueira y Ansaldi siguen sin convencer al cuerpo técnico y a la grada.

    La fórmula le salió a medias. Es verdad que el Atlético manejó más la pelota que en los últimos encuentros y que generó más peligro sobre todo en los primeros minutos, pero también es cierto que perdió el fuelle físico que suele darle empuje y en el que es clave la presencia del ayer sancionado Tiago y Gabi.

    El capitán no disputó ni un minuto y representó, en cuanto al banquillo, la principal sorpresa del encuentro. La otra sorpresa (pero ésta, en cuanto al once) fue la de Koke como manija del equipo. Sorpresa agradable, por cierto.

    El vallecano jugó un gran partido moviendo al Atlético a su antojo y con un elevado ritmo, lo que perjudicó la intención alemana de trabar el fútbol atlético. Fue, junto con Griezmann, el jugador rojiblanco que más corrió y sumó un interesante 80% de acierto en el pase. Sólo Mario Suárez (84% de acierto) le superó en la medular colchonera.

    El único punto negro del canterano fue su fallo en un penalti que, en verdad, fue más acierto del portero contrario que error propio.

    En todo caso, su brillo en esta nueva posición no deja de ser una importante novedad para un Atlético encallado en Liga (es cuarto por detrás del Valencia) y con problemas para pasar ante un rival, el Bayer Leverkusen, a priori inferior. El tiempo dirá si es la adecuada para que el Atlético recobre los bríos de la temporada pasada, eso sí, con un modelo distinto al que le convirtió en campeón de Liga.