El nuevo Barcelona deja fuera de juego a Andrés Iniesta

El Barcelona es otro desde Anoeta. Y no hablamos solo de sensaciones (que también), sino de hechos. Tras la debacle de principios de año, el equipo de Luis Enrique ha crecido en fortaleza física y mental para desarrollar un juego netamente vertical. Un cambio que supuso tiempo, y al que casi todos se han adaptado.

Quizá Andrés Iniesta sea una de esas excepciones. Coincidiendo con el que es su peor año en Can Barça de los últimos tiempos, el manchego apenas participa en en el conjunto azulgrana. Si ya de por sí el peso de los centrocampistas es menor y sus funciones son diferentes, el '8' no es el jugador de antes.

Iniesta ya no es el futbolista que rompía líneas con sus fintas y asistencias. Se ha visto difuminado por un estilo que no aprovecha sus mejores habilidades. Experto en abrir puertas, el de Fuentealbilla no maneja su mejor registro en este combate frenético a golpes que desarrolla el Barcelona.

Sus cifras dan una muestra de lo discreta de su temporada: tan solo dos tantos y cuatro asistencias en un total de 22 partidos. Además, dos goles y dos asistencias de este conjunto se dieron en la eliminatoria de Copa, ante el modesto Huesca de 2ªB.

El 'factor Xavi'

Aunque con números similares, Xavi sí da síntomas de mostrar mejor adaptación a lo que quiere Luis Enrique. Sin ir más lejos, el de Terrasa tuvo un buen partido en San Mamés, jugando en varios tramos del partido de interior zurdo, con menos manejo del balón, pero con más llegada a área rival (incluso tuvo dos ocasiones de gol).

El '6' es más llegador, una capacidad que ha demostrado a lo largo de su carrera. Llama la atención que las cifras de minutos cada vez se equilibran más entre ambos, y un jugador que partía como claramente actor secundario está jugando más de lo que parecía en un primer momento: con 1.544 minutos Iniesta es el jugador número 12, frente a los 1.251 de Xavi, el número 15 en la lista.

Partiendo de un retroceso de ambos en las alineaciones, el impacto de Rakitic y Mascherano (en las ocasiones en que abandona la zaga) junto a Busquets ha dejado a Iniesta con una mayor sensación de pérdida de importancia. El nuevo Barcelona deja fuera de juego al héroe del Mundial.