Fútbol

Varane da un puñetazo en la mesa de la defensa del Real Madrid

    Varane, en un partido ante el Basilea. <i>Imagen: EFE</I>.


    En una semana en la que la defensa del Real Madrid ha sido (desgraciadamente para los intereses de los blancos) noticia, Raphael Varane ha vuelto a la titularidad. Y el equipo no percibió la diferencia. Ya no sorprende a nadie que el francés rinda a nivel de titular. De hecho, su mayor presencia es algo que parecen pedir las circunstancias.

    Son varios los factores a tener en cuenta, pero uno el más importante: la progresión de un defensa que apunta a ser uno de los mejores del mundo. Cuando se le ha dado cierta regularidad en el campo, ha ofrecido su mejor versión, y más ahora, cuando se siente libre de las ataduras que fueron en su momento las dos rodillas.

    "Llevo un año en que no me duele la rodilla y puedo jugar cada tres días sin molestias", dijo el domingo al término del partido contra el Getafe. Un mensaje para Ancelotti, justo cuando Pepe y Sergio Ramos han experimentado un bajón en el rendimiento, reflejado de forma principal en la eliminatoria copera ante el Atlético de Madrid.

    Y, poco a poco, Ancelotti ha captado el mensaje: ha dado 1.445 minutos al central, que ha disputado 23 partidos en lo que va de temporada. Faltando la mitad del curso futbolístico, ya está a punto de pasar la cifra de minutos del año pasado: 1.603.

    Además, va camino de conseguir su mejor marca en los cuatro años que lleva en el Real Madrid. Ésta se produjo en el curso 2012/2013, cuando con Jose Mourinho jugó un total de 2.627, con participación activa en la Copa del Rey y Champions League.

    El galo asume que su situación seguirá siendo la de un jugador con titularidad en bandazos: "Estoy tranquilo y cuando me toca jugar lo intento hacer bien. Pepe y Sergio Ramos juegan más que yo, pero intento hacerlo lo mejor que puedo". Y, de hecho, lo está haciendo.

    Ya en su momento Ancelotti piropeó al joven zaguero, incluyéndole entre "los mejores defensas del mundo". Y Raphael Varane se empeña en darle la razón siempre que puede. Se trata de dar un puñetazo en la mesa de la defensa gala para conquistar la titularidad de forma permanente.