Un descartado Dani Alves se convierte en la llave de la nueva defensa del Barça

Antes de reincorporarse a la pretemporada del Barça después de su Mundial con Brasil, Dani Alves ya sabes que no entra en los planes de Luis Enrique de cara a la próxima temporada del club azulgrana.

El lateral brasileño, que ya lleva varias temporadas siendo uno de los nombres que más suenan en cara verano para dejar el club, tiene hasta el 31 de agosto para buscar nuevo destino y desde el Barça le han pedido que colabore para facilitar la operación.

Sin embargo, desde el Camp Nou se han percatado de que les interesa adelantar la operación lo antes posible, y es que la salida del todavía lateral del Barça podría desbloquear los fichajes pendientes en la zaga por los que suspira Luis Enrique.

Así, la marcha de Alves, de 31 años y al que le queda un año de contrato que pueden ser dos si juega cierta cantidad de partidos, como recuerda Mundo Deportivo, facilitaría la incorporación de un central y otro lateral diestro de amplio recorrido como lo ha sido el brasileño estas temporadas.

Los nombres por los que sigue pujando el Barça son el central del Arsenal Vermaelen y el lateral de la Fiorentina Cuadrado. Si bien la llegada del central belga es factible -Wenger ya asume su marcha de Londres-, el fichaje del colombiano se le complica al Barça, ya que el club florentino se ha enrocado en los 50 millones y no piensa vender a uno de sus jugadores estrella por menos.

En cualquier caso, todos estos movimientos quedan a la espera de resolver el futuro de Alves, que de esta manera se convierte en la llave de la defensa del Barça; un escenario que tanto Bartomeu, como Zubizarreta y Luis Enrique esperan resolver lo antes posible.