Brasil busca a un ejecutivo en la investigación por la reventa del Mundial
Después de que una corte ordenara el arresto del ejecutivo y que otros 10 sospechosos fuesen mantenidos bajo custodia, la policía no pudo localizar a Ray Whelan, de la empresa MATCH Services, una compañía contratada por los organizadores del torneo para ofrecer paquetes corporativos de entradas y alojamiento.
Whelan, que fue arrestado durante un corto espacio de tiempo esta semana y puesto en libertad a la espera de una orden de la corte, no estaba presente cuando la policía llegó al lujoso hotel frente a la playa donde se hospedaba en Río.
Fiscales dijeron en un comunicado que Whelan fue visto saliendo por una puerta trasera del hotel antes de que ellos llegaran.
Horas antes, un tribunal de Río había aprobado la detención de Whelan y de otros sospechosos, que se cree manejaban una red de reventa de entradas originalmente destinadas a federaciones de fútbol y otros cargos importantes.
La investigación llega en un momento en que la presión aumenta sobre la FIFA, el órgano que rige el fútbol mundial, por acusaciones de corrupción y una aparente falta de transparencia en sus prácticas empresariales.
La organización también está bajo el foco por supuestos sobornos pagados por Catar a cambio de derecho de organizar el Mundial de 2022.
La policía brasileña dijo que la red pretendía ganar hasta 200 millones de reales (unos 66 millones de euros) por revender ilegalmente las entradas. La FIFA dijo que estaba cooperando con las autoridades en la investigación.
La autoridad antimonopolio de Brasil también investiga los paquetes de alojamiento de MATCH para analizar si la compañía infló los precios de hospedaje a través de algunos de sus paquetes.
MATCH negó haber cometido delitos.
La firma es la principal proveedora de paquetes de alojamiento para el Mundial y pagó 240 millones de dólares (más de 176 millones de euros) por los derechos exclusivos para vender paquetes corporativos para la edición del 2010 y la actual del torneo.