Fútbol

El Bayern de Múnich de Pep Guardiola se une a la puja por Cesc Fàbregas

    Cesc Fàbregas, en una comparecencia de prensa | Reuters


    Qué Cesc Fàbregas saldrá del Barça en las próximas semanas parece ya un hecho irrefutable. El deseo del jugador por cambiar de aires y el del propio club culé por hacer caja para acometer su reestructuración hace que los deseos de ambos coincidan. Así pues, la única duda que quedaría por resolver es por qué club fichará y cuánto recaudará la entidad del Camp Nou por su salida. Aunque todo apunta a que el de Arenys elegirá el regreso a la Premier League (podría incluso haber pasado reconocimiento médico con el Chelsea de José Mourinho), lo cierto es que las 'novias' del mediocampista empiezan a emerger por todas partes. Y una de ellas tiene nombre de viejo conocido. El Bayern de Múnich de Pep Guardiola también está interesado en el blaugrana.

    Según la emisora británica especializada en fútbol, TalkSport, la entidad bávara habría tenido contactos con Darren Dein, agente del futbolista, para sondear qué opciones existirían de ver al mediocampista luciendo la también camiseta azulgrana de los vigentes campeones de la Bundesliga.

    Una opción en la que el dinero no sería un problema. El Bayern tiene capacidad económica suficiente como para abonar los 40 millones que se exigen por Cesc y los casi 8-10 limpios que podría cobrar en su nuevo destino. Para colmo, en el Allianz Arena entrena el hombre que hizo posible su retorno al Barça.

    Fue el propio Pep Guardiola el que le llevó de vuelta a la Ciudad Condal haciendo buena la dedicatoria que le firmó en una camiseta cuando Cesc era solo un chaval. "Algún día tú llevarás este número en el primer equipo", le estampó sobre una camiseta de los tiempos de Guardiola como futbolista. Y Pep no falló. Cesc volvió al Barça y heredó el 4 de su entrenador, aunque lo hizo con mucho menos fortuna de la que a él le habría gustado.

    Sus tres temporadas como repescado jugador culé han sido agridulces. Tanto, que Fàbregas quiere irse y sentirse, de nuevo, importante en un equipo, aunque éste no sea el Barça de sus amores. Guardiola le daría los galones que él quiere (jugaría en el lugar de Schweinsteiger), pero parece ser que a Cesc no le bastaría.

    El deseo del jugador es el de retornar a la Premier League donde realmente despuntó con el Arsenal. Allí tiene cartel y, sobre todo, sabe a lo que jugar. Para colmo, su familia estaría encantada con vivir en Londres, única ciudad de Inglaterra en la que aceptaría residir (de ahí su negativa a fichar por el Manchester City).

    Así pues, aunque la opción del Bayern pudiera ser tentadora, la lógica dice que el jugador la descartará, aunque en esto del fútbol (y más hablando de fichajes) todo es posible.