Los cinco factores que han hundido a Leo Messi esta temporada con el Barça

Extraña ver a Leo Messi ausente en el campo. El argentino apenas participa, deambula por el campo y su influencia del equipo es nula. Antes le bastaban 15 minutos para meter dos goles y decidir los partidos y ahora apenas tiene esos 15 minutos, apenas corre, apenas marca.

La estadística en el partido de Champions ante el Alético de Madrid era terrible para el argentino. Había corrido durante el partido un kilémetro y medio más que Pinto. Cierto es que Messi tiene ciertos privilegios pero el esfuerzo es innegociable.

Guardiola, el técnico que mejor ha sabido llevar al argentino, auqneu acabaran distanciados, señaló que si Messi no juega bien es "porque hay alguna cosa de su entorno que no funciona". No ha sido un año sencillo para Messi con cinco problemas deportivos y extradeportivos que le ha afectado.

1. Sus problemas con Hacienda.

Un juzgado de Barcelona imputó a Leo Messi y su padre por haber defraudado más de cuatro millones de euros a Hacienda entre 2006 y 2009 de sus derechos de imagen. Ambos depositaron meses después cinco millones y evitaban así que la juez les impusiera una fianza para garantizar su eventual responsabilidad civil.

Además, también pagaron a Hacienda 10 millones de euros en declaraciones complementarias del IRPF por los ejercicios de 2010 y 2011, que también estaban siendo investigados.

2. Una renovación que no se firma

Estos pagos añadidos provocaron que Messi fuera al presidente del Barça, Sandro Rosell, a pedir una renovación de contrato. El argentino ya había sentido la falta de apoyo del club en el problema con Hacienda pero el presidente culé se comprometió a una mejoría importante. Sería el mejor pagado del mundo.

La marcha de Rosell después de la denuncia de un socio del Barça para que se conocieran los detalles del fichaje de Neymar hizo que esa propuesta quedara en el olvido y la negociación con Bartomeu fuera mucho más austera. De los 25 millones que quiere el Barça a los 20 justos que ofrece el Barça.

3. Mala relación con la directiva

Messi se ha sentido solo en el Barça. No es que el argentino sea el jugador más animoso y social del vestuario y del club pero sus diferencias con la directiva aumentaron cuando un vicepresidente aseguró que no entendía por qué había que renovar el contrato de Messi cada cinco meses.

El argentino no se cortó y aseguró que Javier Faus, hombre de rosell que había dicho estas palabras, "no sabe nada de fútbol".

4. Lesión y recuperación en Argentina

Tras muchos percances físicos, Messi finalmente se rompió. La lesión en el bíceps femoral obligó a parar a Leo Messi después de muchos meses jugando a medio gas y sin reuperarse del todo.

Su distanciamiento con los fisios y médicos del Barcelona provocaron que el jugador se marchara a recuperarse a Argentina con los servicios médicos de la Albiceleste. Esta decisión y los plazos de la recuperación, en los que el Barça estuvo al margen, le valieron un buen puñado de críticas.

5. Compromiso y el mundial.

Muchos de los compañeros de Messi comienzan a mirarle con recelo. La falta de compromiso del jugador en muchos partidos comienza a sentar mal en el vestuario que ve como el círculo del jugador cada vez es más pequeño y apenas tiene relación más que con Pinto y Cesc Fabregas.

Los jugadores del Barça comienzan a pensar que Messi está con la mente en el Mundial y que el resto de la temporada en el Barça tan solo será una puesta a punto de cara al Mundial. El único título que le falta a Messi para acercarse a Maradona.