Las críticas a Martino por sus decisiones le empujan a la salida del Barça

La derrota del Barça el pasado sábado en Anoeta (3-1 frente a la Real Sociedad) ha dejado un buen puñado de heridos por el camino, pero una sola víctima. Gerardo, el 'Tata', Martino quedó señalado por el entorno culé (e incluso por miembros del propio club) después de que sus cambios tácticos y sus decisiones durante el partido (o la ausencia de ellas) abocaran al equipo a una derrota que deja al Real Madrid líder y un buen puñado de dudas sobre la Ciudad Condal.

Dudas que, dejan en una situación delicada al entrenador argentino. Hoy por hoy, el de Rosario está más fuera que dentro del Barça de cara a la próxima temporada.

Bien sea por sus propia decisión de no continuar (el viernes pasado ya advirtió que todavía no sabía qué haría), bien sea por que el club no quiere ampliar su contrato (termina el 30 de junio) lo cierto es que nadie da un euro en Barcelona por la continuidad del preparador blaugrana.

Las críticas tras la derrota en San Sebastián llegaron desde todas las direcciones posibles. Fue un torrente desatado que quizá adquirió más virulencia de lo esperado por llevar estancadas un buen puñado de semanas. Los resultados del Barça en los últimos tiempos frenaron a los que no tragan con las decisiones del Tata. Tras caer el sábado, la cosa cambió. Hubo palos para todos los gustos.

Quizá los que más sorprendieron fueron los que el propio entrenador se dirigió a sí mismo.

Martino ejerció la más dura autocrítica en sala de prensa. Afirmó que la derrota era cosa suya. Que había sido él quien había movido mal las teclas con un sistema inventado de la nada y que él era quien no había sabido cambiar el dibujo de juego cuando las circunstancias así lo obligaban. También entonó el mea culpa por la expulsión en el túnel de vestuarios después de insultar, según el acta, al segundo entrenador de la Real Sociedad.

Un ejercicio de autocrítica noble que en lugar de frenar las dudas desde el exterior del equipo, las redoblaron. Ayer la prensa deportiva en Barcelona se levantó con titulares durísimos contra el panorama culé, pero sobre todo contra Martino, algo atípico entre unos periódicos habitualmente serenos ante estas situaciones.

En la calle la indignación de las portadas se multiplicó. Los programas de radio y de televisión mostraron a hinchas desesperados que pedían la cabeza de un técnico en el que muchos decían desconfiar desde hace tiempo.

Con los jugadores en contra

Sin embargo, el dardo quizá más preocupante para Martino es el que procede de su propio vestuario. Los jugadores empiezan a estar cansados del Tata y sus 'volantazos' tácticos, amén de sus decisiones sobre ciertos jugadores.

Así, por ejemplo, no fue del agrado de la plantilla ver como el sábado Xavi calentaba durante 25 minutos para no jugar ni un sólo segundo al igual que no gustó que en Almería Neymar no jugase pese a haber estado en la banda casi una parte entera o como no parece gustarle demasiado a Messi estar siendo sustituido este curso más de lo que solía.

En el plano táctico, ya tras la derrota contra el Ajax, los capitanes se reunieron con Martino para pedirle un regreso a los sistemas de juego y entrenamiento anteriores a su llegada al Camp Nou. A cambio, ellos le defenderían a muerte siempre que tuvieran un micrófono delante.

Martino cumplió y el Barça recuperó su esencia. Incluso en los dos últimos partidos (Sevilla y Manchester) se había vuelto a la costumbre de jugar con cuatro mediocampistas. Sin embargo, en Anoeta, el Tata inventó un sistema con un sólo 'bajito' (Iniesta), Busquets de interior y Song como falso pivote defensivo. Un caos que no ha gustado en el seno del equipo.

Suma y sigue que, por ahora, daña la imagen de Martino de cara a su futuro y redobla esas críticas de las que ya se quejaba cuando el equipo marchaba mucho mejor que ahora.

Quizá por ello decida cumplir la palabra dada en Argentina y no renueve. Quizá sea el club el que prefiera buscar a otro técnico con más bagaje en Europa. Sea como fuere, los títulos serán los que decidan el futuro inmediato del míster blaugrana. Eso y la manera como se consigan, si es que finalmente se consiguen.