Fútbol

Luka Modric o como mejorar a Xavi e Iniesta

    Modric cuajó un gran partido ante el Villarreal | EFE


    Luka Modric se ha ganado el cariño del Santiago Bernabéu. El mediocampista croata ya ha logrado en apenas temporada y media lo que muchos otros (como Benzema o Di María) no han logrado en bastante más tiempo: ganarse sin fisuras a un público que lo ve como una estrella más al nivel de sus mejores figuras.

    El secreto de tanta devoción está en sus propias exhibiciones y en una regularidad que hacía tiempo que no encontraba. Porque si algo atormentaba al 19 merengue en su etapa en el Tottenham era su incapacidad para mantener en el largo plazo la máxima excelencia que solía mostrar en determinados tramos de la temporada. Algo parecido le sucedió cuando, el curso pasado, aterrizó en el Santiago Bernabéu.

    Su llegada tardía (fue fichado a falta de 48 horas para que se cerrase el mercado) y el hecho de haber caído en Madrid en un año complejo no ayudaron a potenciar sus virtudes. Tampoco lo hizo la mentalidad defensiva de un Mourinho que no le veía como acompañante de Xabi Alonso en el doble pivote, sino más bien como un sustituto de Özil en la mediapunta.

    Sin embargo, este curso todo ha cambiado. La ausencia del tolosarra en la media hizo que Ancelotti decidiera apostar por él como fijo en la zona de creación, primero con Khedira al lado y luego con el propio Xabi como acompañante. Una regularidad que le ha permitido seguir creciendo sin que, por ahora, parezca tener techo a la vista. Sea con el 4-2-3-1, sea con el 4-3-3, Luka es un imprescindible.

    La fantasía de Luka

    Y lo es por un doble motivo. Uno es el evidente: su fantasía. Con Özil ya en Londres, el de Split ha cogido su testigo para convertirse en el jugador más creativo de la medular. Sus pases recuerdan mucho a las jugadas de tiralíneas del germano e incluso a las mejores asistencias de Xavi Hernández.

    Cristiano Ronaldo ya ha aprendido a asociarse con él tan bien como lo hacía con Mesut y Alonso ve en su capacidad para encontrar compañeros un arma similar a la que le ofrece el culé con 'La Roja'. Ya no toda la producción creativa tiene que pasar por sus pies y eso le permite estar más fresco.

    Además, Modric está desplegando un arsenal de regates y remates que recuerdan a las acciones favoritas de Iniesta.

    El pasado sábado, ante el Villarreal, una de sus jugadas, rodeado de futbolistas amarillos impotentes ante sus movimientos, recordó a la instantánea de Andrés rodeado de croatas (casualmente) que se hizo famosa en la Euro de 2012.

    Por que él, como Iniesta, sabe retener la pelota con calma, sin que la presión de los rivales le moleste. Parece jugar a un ritmo diferente y esconde el esférico con suficiente maestría como para dar el pase definitivo sin que los que le buscan encuentren el método para hacerlo. Así asistió a Benzema en el Villamarín o logró el tanto con el que abrió el marcador ante el Coppenhague.

    Más robos que Xavi e Iniesta

    Pero es que a todas estas virtudes ofensivas hay que unir su enorme potencial defensivo. Modric ya ha recuperado 128 balones en Liga y su capacidad para presionar con efectividad en campo contrario le ha dado al cuadro merengue más de un pase de gol, cualidad ésta que también comparte con Xavi o Iniesta, entre otros, con la ventaja de que los culés suman juntos 137 recuperaciones. Las 54 de Xavi y las 83 de Iniesta.

    En un estadio, el Bernabéu, que premia el esfuerzo más que la clase, gestos así son los que han logrado disparar su fama entre los aficionados merengues hasta ponerlo en un pedestal en el que, de seguir así, parece complicado que se baje.