Fútbol
Cinco motivos que hacen del Barça un equipo irreconocible en la segunda vuelta
El FC Barcelona da síntomas de flaqueza. El equipo del Tata Martino marcha segundo en la clasificación con los mismos puntos que el Real Madrid que es tercero, y el Atlético de Madrid ya se ha situado en lo alto de la tabla sin rival.
Los tres partidos de la segunda vuelta del Barça son para preocupar en un equipo que ha visto como un terremoto institucional ha pasado por la Ciudad Condal y donde los resultados deportivos comienzan a fallar.
1. Problemas en la directiva
Los problemas nacen en la parcela directiva pero se trasladan al campo de forma inmediata. La salida de Rosell de la presidencia del Barça pareció no influir en el equipo que jugó su primer partido con Bartomeu de presidente en Copa del Rey. Un 5-1 ante el Levante pareció mostrar que, mande quién mande, nada influía en el equipo.
Desde ese día, el ruido mediático en el FC Barcelona ha sido ensordecedor. Acusaciones a Madrid de 'barcelonitis', envidia desde la capital al no tener en el equipo a Messi y Neymar y acusaciones a Florentino Pérez por, presuntemente, influir en las decisiones de la justicia han sido algunos de los incendios provocados desde Barcelona que han podido influir en la plantilla y un técnico poco habituado a tanto ruido mediático.
2. La defensa del Barça flojea
Se trata de la línea más débil del conjunto blaugrana y un mercado de fichajes más, el Barça se ha resistido a realizar fichajes de entidad. Pese a que el problema defensivo es acentuado, el riesgo viene del medio campo donde Busquets no da a basto para frenar a los contrarios.
Xavi no se encuentra en un buen momento y Fabregas o Iniesta, según el partido, no están brillando en la recuperación. A partir de ese momento solo queda Sergio Busquets y una defensa muy ofensiva y con dudas. Si además Valdés no tiene su mejor día el problema es mayúsculo.
3. Messi no marca
Deportivamente hay una cosa que nunca, o casi nunca, falla en el FC Barcelona: Leo Messi. el Argentino es capaz de hacer olvidar cualquier crisis con un partido inolvidable o un 'hat-trick' ante cualquier rival pero desde que el argentino reapareció tras su lesión, su olfato goleador parece resfriado.
En su ausencia, el Barça sacó a relucir la mejor versión de Pedro y Alexis pero la vuelta del argentino parece haber ensombrecido al resto de cracks culés. Leo Messi no ve puerta y retrasa su posición par actuar como centrocapista pasador. El nivel de Messi sigue siendo alto pero no decisivo como cuando juega con libertad total en la punta del ataque.
4. A mal resultado... adiós Xavi
Si por un jugador es reconocible el estilo del Barça desde que Guardiola pusiera en marcha la gran maquinaria blaugrana es Xavi Hernández. También Iniesta representa al 100% el estilo de juego que el Barça solía practicar en el Camp Nou.
Gerardo Tata Martino parece, sin embargo, tener ciertas dudas al respecto cuando las cosas se ponen complicadas. El de Terrasa suele ser uno de los primeros cambios del entrenador argentino cuando las cosas no van bien. En los tres partidos que el Barça ha perdido esta temporada Xavi fue sustituido mientras que en tres de los seis empates del equipo Xavi bien el final del partido desde el banquillo.
El morir con un estilo parece olvidado por Martino que ante finales ajustados prefiere un estilo más directo y menos elaborado.
5- Falta de sinfonía público-jugadores
El pleno debate sobre la ampliación del Camp Nou por el que el Barça realizará un referéndum el próximo 5 ó 6 de abril, la asistencia de público va cayendo paulatinamente. si en el partido de Copa, lluvioso y decidida la eliminatoria, parecía lógico ver las gradas medio desiertas, la entrada ante el Valencia y el Málaga, 66.969 y 56.355 espectadores respectivamente, extrañaron entre los directivos blaugranas.
Por si fuera poco Dani Alves incendió la cerilla al asegurar que "a veces parece que juguemos en campo contrario" cuando tenemos que remontar un partido complicado. Un dardo envenenado que solo es un detalle del ambiente complicado y al que no se está acostumbrado en Barcelona.