Fútbol

La última 'burla' de Kaká al Real Madrid: se lesiona y no cobrará con el Milan

    Kaká no cobrará durante su lesión en el Milan. Foto: Reuters.


    La nueva etapa de Kaká en el Milan no tuvo su mejor comienzo, ya que el centrocampista brasileño se lesionó en su primer partido oficial con los rossoneri. Una lesión en el aductor que le mantendrá cerca de tres semanas fuera de los terrenos de juego, y que ha descubierto una nueva faceta en el ya exjugador del Real Madrid.

    Porque, tras conocerse su lesión, el jugador anunció que durante el tiempo de recuperación, el Milan no tendría que pagarle su sueldo. Una iniciativa que partió del propio Kaká y que evidencia una actitud muy diferente a la que el madrileño exhibió en la capital de España, donde en ninguna de sus lesiones dejó de cobrar su salario y en ocasiones irritó a propios y extraños con varias decisiones en las que el bien del equipo podría haber pasado a un segundo plano.

    El mejor ejemplo se dio en 2010, donde Kaká, renqueante de una lesión en la rodilla, no se operó para jugar en Mundial de Sudáfrica. En la gran cita del fútbol, el brasileño se lesionó, pero siguió forzando, con el consiguiente agravamiento de su dolencia, que finalmente derivó en una rotura de menisco que estuvo a punto de costarle la carrera.

    Un contrato jugoso

    Otro de los episodios más conocidos del calvario de lesiones del brasileño en el Real Madrid fue el de su pubalgia, una lesión que le tuvo en el dique seco o bajo de forma durante sus primeros meses en el Real Madrid y que arrastraba de su paso en el Milan. A pesar del tiempo que conllevó su total recuperación, el cuerpo técnico blanco tiró de paciencia con tal de recuperar al jugador que había sido Bota de Oro. Por ejemplos como este, la noticia de la 'auto-suspensión' de su sueldo en el Milan ha provocado un enfado en las milas madridistas.

    A todo esto se une la reciente salida del brasileño, que no se produjo tal y como le habría gustado al club blanco. Su pretensión de seguir manteniendo su jugoso contrato puso muy difícil al Madrid la venta de un jugador que tenía la cabeza fuera del Santiago Bernabéu. Lo ocurrido en los dos últimos veranos, en los que la actitud de Kaká hizo muy complicada su salida, aún se recuerda en Madrid, y hace que su gesto con el Milan sea interpretado en el Real Madrid como la última 'burla' del brasileño al que fue su equipo durante cuatro temporadas.