Fútbol
La 'mourinhización' de Carlo Ancelotti
El Real Madrid vuelve a la normalidad. Después de los partidos de sus internacionales, el equipo blanco vuelva a entrenarse con todos sus miembros y un buen puñado de novedades importantes. Desde la presencia de Bale hasta la ausencia de Özil, pasando por las dudas sobre Marcelo o Coentrao, los movimientos se le acumulan a Carlo Ancelotti.
Por eso es de prever que el equipo que ponga sobre el césped del Madrigal el próximo sábado pueda sufrir mutaciones en cuanto a sus nombres, pero sobre todo, con respecto a su estilo. Forma parte del proceso de 'mourinhización' que, obligado o voluntario, está encaminado afrontar el preparador del equipo blanco.
'Mourinhización' porque Ancelotti parece dispuesto a dar ciertos pasos que hagan que el Real Madrid vuelva a adoptar algunas de las señas de identidad que eran norma con el portugués en el banquillo, algo que en las tres primeras jornadas de Liga parecía olvidado.
En esos tres partidos el Real Madrid apostó por alineaciones de marcado carácter ofensivo en el que el dibujo (un 4-3-3) se llenó de 'jugones' para tocar la pelota y no tanto para lanzarse al contragolpe, como era norma con 'The Special One'.
Así, por ejemplo, se pudieron ver guiños a un nuevo Real Madrid como la posición adelantada de Marcelo y Arbeloa (casi carrileros) jugar en algún encuentro sin pivote defensivo (ante el Granada, Isco y Modric llevaron la manija) o incrustar a un mediocampista como Özil en el extremo derecho.
Algunos de estos gestos, sin embargo, empezarán a ser historia en breve. La entrada de Bale en el equipo blanco tendrá buena parte de culpa. El galés, extremo puro de velocidad y explosividad, nada tiene que ver con Özil. La lógica dice que será él quien ocupe el puesto del germano como extremo derecho. En el otro costado jugará Cristiano. Velocidad en estado puro frente a la pausa que le solía poner Özil.
Es el nuevo cambio de estilo que, antes de que se anunciara el fichaje de Bale, ya parecía querer Ancelotti cuando decidió que fuera Di María y no el alemán el que se quedase en el Real Madrid.
Frente al Villarreal, además, habrá otros movimientos que hará que los blancos vuelvan a los 'viejos tiempos'. La lesión de Marcelo y Coentrao (como al principio del curso pasado) harán que Arbeloa ocupe el lateral izquierdo, con la diferencia de que en el derecho, en lugar de estar Essieno, será Carvajal el encargado de ocupar el puesto.
También por lesión se quedará Isco fuera de un once en el que Casemiro podría tener minutos, lo que haría que los blancos formasen con dos pivotes defensivos (Khedira y Casemiro) junto a Modric como hombre encargado de distribuir fútbol en la medular, algo parecido a lo que solía hacer Mourinho cuando alineaba a Xabi Alonso junto con el alemán y un hombre creativo (Özil o Modric) junto a ellos.