Fútbol

El enfado de Benzema, las dudas de Ancelotti y el fichaje blanco de Luis Suárez

    Luis Suárez, a la izquierda, observando ayer el Liverpool - Man.U | EFE


    El Santiago Bernabéu se ha convertido en un hervidero. El estadio del Real Madrid es un bullir constante de llamadas para cerrar las últimas operaciones puestas en marcha. Algunas, de llegadas (como la presentación de Bale); otras, de salida. Camino de ida y vuelta en el que se han colado varios protagonistas inesperados y un enfado monumental: Karim Benzema empieza a hartarse de su situación.

    El delantero francés del Real Madrid salió este domingo de nuevo entre pitos de un terreno de juego donde había dado dos asistencias de gol al que fue, durante el duelo ante el Athletic, estrella del partido, el malagueño Isco.

    Pese a ello, pese a que ya suma dos goles en lo que llevamos de Liga y a que tiene en el banquillo a Zidane, su gran valedor junto a Florentino Pérez, Benzema está molesto.

    No entiende por qué se le critica. No entiende por qué el público de su propio estadio se vuelve contra él y le pita cada vez que sale del terreno de juego. Tampoco entiende por qué su entrenador, Carlo Ancelotti, le dio al final del partido una suerte de 'palo' al compararlo con Di María.

    "Benzema ha sido pitado un poco porque su estilo no es como el de Di María. A él lo han aplaudido porque corre y lucha. Eso es lo que gusta aquí y Karim debe de darse cuenta de ello", afirmó el técnico italiano.

    Así pues, la que debería transformarse en su temporada (ya no tiene competencia, el puesto del nueve es suyo), se está convirtiendo, por ahora, en una temporada muy agridulce. Los datos le avalan, pero sus sensaciones y el ánimo del madrisimo, tampoco.

    Las dudas de Carlo

    Factores a los que se une su entrenador. Las palabras de Ancelotti refrendan que el italiano tiene dudas. Desde principios de temporada, el preparador ha venido dejando entrever al club que la llegada de otro delantero centro no le vendría mal a la entidad de Concha Espina, toda vez que no sabe cómo responderá el ariete francés. Es cierto que tiene a Morata y Jesé, pero entiende que darles el 'marrón' de jugar de titular si Benzemá falla podría ser un exceso de presión para los chavales.

    También es cierto que la llegada de Bale ofrece al italiano la alternativa de jugar con Cristiano Ronaldo de nueve (ayer probó durante 15 minutos en este puesto).

    Sin embargo, y pese a todo ello, al transalpino le gustaría tener alguien con más fuerza y consistencia para ocupar el puesto de delantero centro. De ahí que pidiera a principios de curso la llegada de Cavani, no viera con malos ojos la de Ibrahimovic y, ahora, haya pedido a club invertir la salida de Özil (si es que se produce) en Luis Suárez.

    El equipo blanco llamó en la tarde del domingo al Liverpool para conocer su situación exacta. El uruguayo parecía tener fija su permanencia en Anfileld, pero, por ahora, no está jugando lo que deseaba en el líder de la Premier. Sin él, los 'reds' se hicieron ayer con un liderato histórico tras vencer al Manchester United.

    Suárez vale 45 millones

    Pese a ello, en Liverpool siguen inflexibles. Luis Suárez cuesta 45 millones. Ni uno más. Ni uno menos. Así se lo han dejado claro a Arsenal, Chelsea y Manchester United. Los tres llamaron a su puerta y salieron con la misma respuesta. Y los tres declinaron el fichaje por entenderlo excesivo. Sin embargo, en el caso del Real Madrid, la llegada de dinero fresco podría cambiar el sentido de la operación.

    Sea como fuere, Luis Suárez está como loco por aterrizar en el equipo blanco. En realidad, está loco por irse de Inglaterra, donde se ha sentido vejado y maltratado por la prensa y afición ante sus arrebatos de ira y racismo. Fueron errores, pero, según él, no como para sentirse sometido al acoso diario de medios y espectadores.

    De entre todas las opciones de salida, la del Bernabéu es la que más emociona al jugador que vería con buenos ojos ser el ariete del equipo blanco. Ancelotti también lo vería bien, toda vez que su estilo (agresivo y rápido) cuadra mejor con su idea de fútbol que la versión dada por Benzema.

    Ahora todo está en manos del francés y de las posibles ofertas que llegasen por él. Por ahora, sólo el Arsenal (de nuevo) parece interesado en su fichaje precisamente para cubrir el hueco que debería haber tapado Luis Suárez. Veremos qué sucede en las próximas horas de un mercado de fichajes que se ha vuelto loco.