Fútbol
El ofrecimiento de Ibramovic reabre el debate interno sobre la delantera del Real Madrid
El Real Madrid empieza a dejarse llevar por un debate interno que ha cogido fuerza y que apunta a la delantera blanca. La posible salida de Higuaín (la oferta del Napoles va camino de obrar su marcha) y el ofrecimiento de Ibrahimovic han reabierto más si cabe las dudas merengues. ¿Qué hacer ante la marcha del argentino? ¿Fichar a un delantero o mantener la apuesta por la cantera?
La diferencia entre una y otra alternativa se mide en millones de euros. Varias decenas, por cierto. Por que ése es, hoy por hoy, el principal argumento de la dirección deportiva merengue para eludir la opción de traer a un nueve que sustituya a Higuaín.
Cuando el Real Madrid ha llamado a la puerta de otros arietes (que lo ha hecho, Cavani entre ellos) las cantidades que han pedido por un posible ariete se han disparado tanto en lo que se refiere al traspaso como en lo que se refiere al sueldo del jugador.
Y ante ese panorama, el Real Madrid prefiere apostar por la gente de la casa. Morata y Jesé cuentan con el apoyo del presidente Florentino Pérez y de un Zidane que los conoce bien.
Ambos, entienden desde el Bernabéu, tienen clase para ejercer sin problemas de suplentes de Benzema, hombre llamado a ser el titular indiscutible del conjunto blanco. Si la apuesta les sale bien, tendrán delantera para mucho tiempo. Claro que no todas las voces autorizadas del equipo blanco lo tienen tan seguro. Es ahí donde nace el debate.
Porque parte de la zona noble del Bernabéu tiene miedo a que el plan salga mal. En primer lugar, por el propio Benzema. El francés es un gran delantero, pero en sus cuatro temporadas de blanco ha protagonizado momentos grises que han despertado dudas sobre cuál será su rendimiento futuro, si el del Karim perdido del curso pasado, o el que goleó a ritmo de 'killer' en la famosa Liga de los 100 puntos.
En tal caso, serían Morata y Jesé los responsables de llevar la responsabilidad de liderar la delantera blanca, algo que quizá les queda grande. Ahí es donde nace la idea de fichar un segundo delantero centro de garantías. Una llegada que, con todo, podría forzar la salida del propio Morata y Jesé, algo que no gustaría entre buena parte de una afición que reclama que se dé una oportunidad a ambos chavales.
¿Y Ancelotti que dice? El italiano pidió en sus primeras negociaciones con el Real Madrid la llegada de Cavani, pero su ex, el PSG, se ha adelantado con un derroche de dinero que ahora acerca a Ibrahimovic a la capital. Carlo da el visto bueno al sueco y el Real Madrid duda.
Aunque el preparador trabajará con lo que le llegue (sólo pidió a Illarramendi), lo cierto es que le gustaría contar con algún delantero más de garantías con el que completar un plantel competitivo que aún no parece cerrado.