El buen momento de Kaká amenaza a Di María, Higuaín y Benzema

La delantera del Real Madrid está pasando por un mal momento de forma. Lo demuestran los números y las sensaciones. En el primer apartado, la cifra es clara. Benzema e Higuaín llevan anotados un total de 13 goles menos que el curso pasado a estas alturas. En el segundo aspecto, su sobrepeso y falta de lucidez en el juego blanco demuestra que no están siendo los mejores días para una dupla que el año pasado fue algo más que letal.

Ante semejante sequía, José Mourinho tomó ayer una decisión: dar entrada a Morata. El delantero de la cantera salto de inicio en lugar de Benzema (Higuaín estaba sancionado) y marcó a los dos minutos de partido. Sin embargo, la expulsión de Ramos hizo que el técnico blanco decidiera sustituirlo.

Su ausencia provocó un cambio en el dibujo del Real Madrid. Cristiano Ronaldo pasó permutar su posición, del costado derecho al puesto de nueve puro. Por detrás, Kaká se echó el equipo a la espalda y comenzó a generar buena parte de las ocasiones blancas. La fórmula funcionó y con espacios por delante, el ataque merengue no se resintió. El brasileño parecía haber vuelto a su mejor versión, esa que apunta a un futbolista fino desde el punto de vista físico y determinante en el plano más deportivo.

Tal fue su rendimiento que al ser sustituido por Di María, recibió la ovación de un Bernabéu entregado. Era la segunda ocasión que la parroquia merengue lo aplaudía en apenas siete días. Una semana atrás, ante el Sevilla, Kaká también fue de la partida y también cuajó un gran partido en ataque y en defensa.

Se multiplicó por todo el campo para presionar a la medular hispalense. Tal fue su rendimiento, que muchos creyeron que Mourinho lo usaría contra el Manchester United. No fue así. Kaká no jugó ante los reds ni un sólo minuto

Pese a ello, el partido de Di María, Benzema e Higuaín contra los ingleses no fue el esperado. Los dos primeros salieron de inicio y apenas generaron peligro. Especialmente preocupante fue el rendimiento de Benzema, agotado físicamente y poco lúcido con la pelota en los pies. Higuaín también saltó al césped pero no solventó la situación.

Tuvo que ser de nuevo Cristiano Ronaldo el encargado de echarse al equipo a las espaldas acaparando casi toda la producción ofensiva blanca.

Ante este panorama, y la reiteración del buen momento de forma de Kaká, en el Bernabéu empieza a barajarse con la opción de que el brasileño juegue alguno de lo dos próximos partidos clave del Real Madrid: en el Camp Nou en Copa del Rey y en Old Trafford en la Liga de campeones.

En este último estadio, por cierto, protagonizó uno de sus mejores partidos en el Milan. Sucedió en 2007, año en el que el cuadro 'rossonero' levantó la Liga de Campeones gracias, en parte, a la exhibición de Ricardo aquella noche.

Mourinho podría estar meditando volver a usarlo para la vuelta de los octavos de final. La fórmula será simple: Kaká saldría en lugar de Benzema o Higuaín y ocuparía el puesto de mediapunta. Cristiano Ronaldo sería el delantero centro. Si el United decide lanzarse al ataque, dejaría espacios a su espalda que ambos futbolistas podrían aprovechar.

Asunto distinto es el Barça, toda vez que no es un equipo que deje huecos con los que contragolpear. En el Camp Nou, Kaká no le robaría su puesto a un delantero, sino a Di María. Con él sobre el césped, podría ayudar a la medular blanca a frenar el trabajo del mediocampo culé.

Sea como fuere, el protagonista de la historia prefiere echar balones fuera y no hacerse ilusiones. "Es una decisión del míster. Yo sólo quiero demostrarle a esta afición que puedo triunfar aquí. Me siento bien físicamente y eso es lo que cuenta. Sólo pretendo ayudar al equipo", comentó en la zona mixta tras ser uno de los mejores del Real Madrid en el triunfo, 2-0, ante el Rayo Vallecano.