Los retrasos en la recuperación de David Villa disparan las dudas en el Barça

El FC Barcelona sigue realizando su pretemporada (ayer empató a cero con el Manchester United) con un ojo puesto en uno de sus referencias. La recuperación de David Villa se ha convertido en una 'cuestión de Estado' en el conjunto culé.

Regreso que, tras lo acontecido en Goteborg, va camino de sufrir el enésimo retraso. El asturiano ni se sentó en el banquillo pese a ir convocado con la expedición culé. Además, tras el partido, Tito Vilanova confirmó que no estará en el amistoso que se jugará en Rumanía el próximo 11 de agosto.

Así las cosas, y ya sin partidos amistosos de por medio, lo más probable es que la entrada del jugador en el equipo sufra una ralentización, por cuanto los siguientes encuentros son ya duelos oficiales tanto de Liga como de Supercopa de España.

De cumplirse estas expectativas, podríamos tener que esperar a septiembre para que el internacional volviera a vestirse de corso. Mucho después que los plazos que él mismo se marcó. Villa quiso estar listo para jugar la Eurocopa. Él mismo se autodescartó y, desde entonces, lejos de ver cerca la luz al final del túnel, los plazos han sufrido reveses.

Tanto retraso ha provocado que el Barça comience a sentir dudas de cómo retornará. Algo importante si se tiene en cuenta que no se han buscado refuerzos en esta posición precisamente por su retorno. Los contratiempos de Villa también han forzado al club a retener a Afellay, hombre que, de haber sido vendido, habría dejado dinero en casa para lanzarse hacia el futbolista que realmente interesa: un mediocentro que pueda ejercer de central.

Entre tanto, el futbolista es un mar de incógnitas en cuanto a si volverá a ser el de antes de su rotura de tibia. A sus 30 años de edad, el Güaje, es consciente de que las recuperaciones de las lesiones son, ahora, cruciales. De ahí que prefiera ir con pies de plomos antes de volver a jugar con un Barça que le espera con los brazos abiertos.