Fútbol
El Milan quiere dar lo mínimo por Kaká: espera una cesión y el 50% de su sueldo
El acuerdo para el traspaso de Kaká desde el Real Madrid al Milan tiene cada vez más visos de ser realidad: el jugador lo ve como la mejor opción, mientras que la excelente relación entre los dirigentes de ambos clubes, y la necesidad de la entidad madridista por desprenderse de él, debería facilitar un pronto acuerdo, por el bien de todas las partes. Pero hay un problema.
El Milan no está dispuesto a hacer una enorme inversión por el retorno del ídolo de su afición. Más bien al contrario, el equipo que regenta Adriano Galliani pretende la llegada de Kaká por una cantidad muy inferior a la que en un principio solicitaba el club presidido por Florentino Pérez.
Pese a que algunas fuentes hablan de un pago por el traspaso que rondaría los diez millones de euros, los medios italianos hablan de que las aspiraciones milanistas juegan con la posibilidad de que el jugador llegue gratis, a modo de cesión, toda vez que éste está forzado a buscar una salida. Además, esperan que el jugador, que sólo maneja al conjunto italiano como opción competitiva, se rebaje el sueldo en un 50%, hasta los cinco millones de euros.
Esta 'racanería' de los italianos contrasta con las expectativas que se crearon hace dos semanas en torno a la posibilidad de que el club rossonero aprovechara los 62 millones de euros obtenidos por el traspaso de Ibrahimovic y Thaiago Silva al PSG, para realizar un gran desembolso por el fichaje del astro brasileño e iniciar con él un efecto cascada en el mercado de fichajes. Pero lejos de eso, el Milan decidió la venta de dos de sus mayores valores con el objetivo de sanear y equilibrar sus cuentas, por lo que prácticamente se descarta cualquier posibilidad de que el presidente Silvio Berlusconi dé luz verde a la operación si el montante final se eleva hasta las dos cifras de millones.
Hace unos días, tal rebaja de las pretensiones económicas blancas se habría antojado impensable, pero la comunicación de José Mourinho a Kaká de que no cuenta con él y su invitación a buscar equipo, le otorga una mayor fuerza negociadora a la entidad italiana. En cualquier caso, el Real Madrid no está dispuesto a regalar a un jugador por el que pagó más de 60 millones de euros en 2009 y, aunque el mero ahorro de su ficha anual ya supondría un ingreso no esperado, los dos clubes deberán alcanzar un acuerdo que beneficie a todas las partes. Y deberán, además, hacerlo pronto, ya que ni Mourinho ni el propio Kaká quieren que éste viaje a Los Ángeles este sábado para la gira blanca por Estados Unidos.