Los cambios desmienten a Guardiola: el Barça sigue pensando en ganar la Liga

Pep Guardiola insiste en sala de prensa. "Sigo pensando que la Liga está muy difícil, casi, casi imposible", afirmó el pasado sábado tras ganar al Mallorca. Su discurso se repite pese a que los culés ya han recortado cuatro de los diez puntos que le sacaba el Real Madrid. Este mensaje de humildad y 'derrotismo' ha levantado un debate que ayer el propio Guardiola tiró por tierra. El Barça no ha tirado la liga. Los cambios realizados en San Siro, ante el Milan, así lo demuestran.

Cambios y suplencias, porque lo que más llamó la atención de lo visto en el Giuseppe Meazza no fue una sustitución, sino que que Cesc no disputara ni un minuto en un choque de tantísimo peso como la ida de los cuartos de final de la Champions League. La ausencia del catalán fue la sorpresa del once. Keita entró en la medular y mandó a Iniesta a la delantera, dónde habitualmente está jugando Fábregas.

Más tarde, aunque el partido se puso feo para los intereses blaugranas, Guardiola no le dio la oportunidad de saltar al césped para desatascar la maraña que había establecido el Milan.

Todo lo contrario a lo sucedido en el partido de la fase de grupo jugado en Italia: Cesc fue uno de los jugadores más destacados de un partido vibrante en el que el 4 blaugrana intervino en las mejores combinaciones culés.

Reservando a Iniesta y Alexis

Los elegidos para entrar en el maltrecho césped de San Siro fueron Pedro y Tello. He aquí el segundo dato que llama la atención de los cambios realizados por Pep: el técnico no agotó las tres sustituciones.

Además, estos dos cambios fueron trascendentes por cuanto sentaron en el banco a Iniesta y a Alexis, dos de los jugadores más destacados en la primera mitad, en la que el Barça tuvo contra las cuerdas al cuadro de Allegri. El motivo de estos cambios y movimientos esconde una mirada al campeonato nacional.

Guardiola pensó con ellos en el duelo que los blaugrana tendrán contra el Athletic de Bilbao el próximo sábado. Había que dar descanso a hombres importantes que previsiblemente tendrán minutos ante los de Bielsa.

Si su teoría sobre la Liga ("es imposible") fuera cierta, Guardiola habría desgastado más a piezas importantes para lograr un mejor resultado en una eliminatoria cuyo resultado, por ahora, sonríe más a los milanistas que a los culés.

Lo cierto es que, como muchos temían, Pep dice una cosa en sala de prensa y piensa otra delante de sus futbolistas. Un ganador como él no tira títulos y más si es el de la regularidad, al que siempre ha dado una importancia enorme, más incluso desde la llegada de Mourinho al eterno rival, el Real Madrid.