Fútbol
Real Madrid: Mourinho, Casillas y su bronca por la huelga de jugadores en agosto
La victoria del Real Madrid en Nicosia contra el Apoel (0-3) en la ida de los cuartos de final de la Champions League supone un bálsamo para las tensas relaciones entre Mourinho y el vestuario blanco, especialmente los españoles. Tensiones que esta temporada arrancaron con la bronca entre el técnico y Casillas a propósito de la huelga de jugadores. | Los jugadores desmienten a Mourinho
El paro convocado por la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) supuso que el campeonato se retrasó una jornada, esto es: en lugar de comenzar en el fin de semana del 21 y 22 de agosto, la primera jornada se trasladó siete días más tarde, con el consecuente trastorno para el calendario y el trabajo de la mayoría de equipos, entre ellos, el Real Madrid.
Aquella huelga tuvo como principal motor el malestar de este sindicato por los impagos de los clubes de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), así como la falta de acuerdo en la negociación del convenio de los jugadores. Pese a que los integrantes del club merengue no se encontraban afectados por esta problemático, sus pesos pesados se solidarizaron con el resto de compañeros de profesión y secundaron esta medida de protesta.
De hecho, el propio Casillas se implicó en primera persona como uno de los pesos pesados de la nueva cúpula directiva de la AFE que preside Luis Rubiales. Así se lo comunicó a José Mourinho. "Haremos huelga como el resto de plantillas de Primera División", le dijo el portero a su entrenador.
El fin de semana de la discordia
La reacción de Mourinho fue la de aceptar la huelga contra su voluntad. El técnico luso no comprendía porqué sus jugadores, libres de las penurias del balompié español, se unían a un paro que afectaba a los intereses del club blanco por aquello de tener un calendario más apretado que el resto de plantillas de Primera.
Así se lo manifestó a Casillas a principios del mes, cuando se atisbaba que la amenaza de la AFE podría convertirse en realidad. Ambos, entrenador y capitán, llegaron a un acuerdo: si finalmente así sucedía y había huelga, ese fin de semana sería un fin de semana libre para los merengues a cambio de sacrificar algunas fechas de vacaciones previas a la huelga.
Sin embargo, según informa Manolo Lama, redactor de Cope y Cuatro, Mourinho cambió sobre la marcha su plan inicial y obligó a sus futbolistas a acudir a entrenar ese fin de semana, al contrario de lo negociado en un primer momento con Casillas.
El gesto provocó el enfado del arquero, y así se lo manifestó en el vestuario al entrenador quién le recriminó la actitud de su jugador. La discusión elevó su tono y provocó el segundo encontronazo serio de la temporada.
Días antes, el luso se enfadó con su pupilo por haber llamado a Xavi, Piqué y Puyol para pedirles perdón por su actitud durante la vuelta de la Supercopa de España. Ése gesto podría haber desencadenado el cambio de planes de Mourinho con respecto al fin de semana libre.
Campaña llena de roces
A lo largo de la temporada los roces entre ambos han sido reiterados. A principios de campaña Casillas lideró las quejas de la plantilla por el trato de ciertos jugadores y, junto con Sergio Ramos, comandó la reunión anticrisis de Valdebebas . Más adelante, las críticas del vestuario por la actitud de Mourinho ante el Barça en Copa del Rey y el caso del 'silenzio stampa' tras Villarreal han sido otros de los conatos más tensos de lo que llevamos de temporada.
Tensiones que, según José Ramón de la Morena, de la Cadena Ser, siguen en aumento, tal y como está manifiestan directivos del club blanco que estarían filtrando el malestar que el propio Casillas les transmite, cada vez con mayor frecuencia. EcoDiario.es ya contó la semana pasada que la comunicación entre ambos es casi nula y se basa sólo en las instrucciones que un entrenador da a uno de sus jugadores. Nada más.