Irina, Cristiano, Bisbal, Jessica Bueno y muchos más en la gran fiesta del fútbol

La que iba a ser gran fiesta del fútbol, con la Gala de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), acabó convertida en la gran fiesta de Cristiano Ronaldo e Irina Shayk. El luso porque acaparó premios como si no hubiera un mañana (Mejor Gol, Mejor Delantero y Mejor Jugador). La rusa, por su vestido rojo, por su mirada felina, porque su presencia se sentía a 50 metros a la redonda y por ser la más guapa de la noche (con permiso de otras guapas oficiales). 

Por si fuera poco, la rusa no sólo estaba atenta a ir perfecta, que lo iba, sino a que su chica también. Así, segundos antes de posar ante los medios, Irina cogió a Cristiano por banda (como hace él en el campo) y le colocó la corbata. Si es que hay que quererla. Con ángeles así, es normal que el luso lleve años en racha, coronados con una nueva nominación al Balón de Oro, para el que es favorito. Casi nada. 

Andrea Salas

Y eso que la top model no tuvo fácil lo de ser la más guapa de la noche. La competencia fue muy dura, y a las pruebas nos remitimos. No hay más que ver a Andrea Salas, la mujer de Keylor Navas, Mejor Portero, y su espectacular vestido, escotazo de vértigo incluido. No fue la única WAG que lució palmito, pues la esposa de Luka Modric, Vanja Bosnic, también iba muy guapa. 

Quien tampoco defraudó fue Jessica Bueno. La ex de Kiko Rivera acudió de la mano de Jota Peleteiro, jugador del Brentford, con un precioso vestido aguamarina que remarcaba la estilizada figura que se le ha quedado a la modelo, tras convertirse en una apasionada del fitness. 

Dos guapas y un reencuentro

Y si hablamos de fitness y chicas deportistas, la primera persona que nos viene a la cabeza es Cristina Pedroche. La vallecana tampoco quiso perderse la gala y lucir palmito con un delicioso vestido azul marino estampado. Un look que, a buen seguro, encandiló a los inversores asiáticos con los que compartió velada. 

Paula Vázquez, guapísima tras engordar 13 kilos en las últimas semanas, también se apuntó a la Gala LFP. La presentadora, a punto de cumplir 40 años, estaba despampanante con un vestido asimétrico morado. 

No obstante, la sorpresa de la noche la dieron David Bisbal y Chenoa. No, no posaron juntos, ni siquiera hablaron, pero hacía años que la ex pareja no coincidía en el mismo recinto y, las cosas como son, hace ilusión. La pareja de ex triunfitos marcó a toda una generación, y no son pocos los que sueñan con una reconciliación. Eso sí, complicado está pues Bisbal está enamorado a más no poder de La China Suárez.