Europa

El primer día del papa Francisco: hay que "tener el coraje de caminar con la Cruz del Señor"

    El papa Francisco durante la misa en la Capilla Sixtina. <i>Imagen: Reuters</i>


    Tras su elección este miércoles, el Papa Francisco ha protagonizado su primer día como sumo pontífice con dos importantes declaraciones. En una carta dirigida al jefe de la comunidad hebrea de Roma y publicada este jueves expresaba su deseo de contribuir al "progreso de las relaciones entre judíos y católicos". Más tarde, en la primera misa oficiada como papa, Francisco reconocía que hay que "tener el coraje de caminar con la Cruz del Señor".

    Tras una cena con los cardenales electores, el sumo Pontífice acudía temprano en la mañana de este jueves a la basílica de Santa María la Mayor en Roma para realizar un rezo íntimo.

    Poco después, el pontífice pidió a un chófer que lo llevara al hotel de los religiosos, el Domus Internationalis Paulus VI, donde se había hospedado durante los días previos al inicio del cónclave esta semana para pagar la factura y "dar ejemplo". "Quería ir a buscar su equipaje y sus bolsas. Había dejado todo allí", dijo un portavoz del Vaticano en un encuentro con medios.  "Se detuvo en la oficina, saludó a todos y decidió pagar la cuenta de la habitación (...) porque estaba preocupado por dar un buen ejemplo de lo que sacerdotes y obispos deberían hacer", agregó, y es que este hotel es ahora propiedad del papa, por lo que no hubiera sido necesario que pagara.

    Poco después de la comida se  conocían las primeras declaraciones públicas del papa Francisco, apenas 12 horas después de ser elegido. "Espero intensamente poder contribuir al progreso de las relaciones entre judíos y católicos conocidas a partir del Concilio Vaticano II, en un espíritu de colaboración renovada", se puede leer en una misiva hecha pública en la web de la comunidad hebrea de Roma.

    Su primera misa en la Capilla Sixtina

    Ya por la tarde, el papa Francisco ha oficiado desde las 17:00 horas su primera homilía en la Capilla Sixtina ante los cardenales. Además, esta Misa servirá para cerrar el cónclave, tres días después de su apertura.

    "Cuando caminamos, edificamos y confesamos sin llevar la Cruz de Cristo, obispos, cardenales, papas, somos mundanos pero no discípulos de Cristo", ha dicho.  Además, ha añadido que hay que "tener el coraje de caminar con la Cruz del Señor y edificar la Iglesia sobre la sangre de Cristo y de confesar la única gloria: Cristo crucificado"

    De forma didáctica y sin dejar de gesticular con sus brazos, el nuevo Papa se ha detenido en el elemento común de las dos lecturas y el evangelio: El movimiento en el camino, en la edificación de la Iglesia y en la confesión. "Caminar, edificar, confesar", ha remarcado.

    Así, ha comenzado explicando que el Señor invita a caminar en su presencia y ha recordado que "la vida es un camino y cuando se para, la cosa no funciona". "Quando ci fermiamo la cosa non va", ha indicado en italiano, idioma en el que ha pronunciado toda la homilía.

    Además, ha subrayado que hay que "edificar la Iglesia, la esposa de Cristo sobre la piedra angular", no como los castillos de arena que hacen los niños que se derrumban fácilmente. Y confesar. "Podemos caminar y edificar todo lo que queramos pero si no confesamos ante Jesucristo, la cosa no funciona", ha añadido, al tiempo que ha subrayado que "quien no reza al Señor, reza a la mundanidad del diablo, al demonio".