López admite su error en la alcaldía de Ponferrada y exculpa a Rubalcaba

El intento del secretario de Organización del PSOE, Óscar López, de hacer de "cortafuegos" y exculpar a Alfredo Pérez Rubalcaba por el pacto en Ponferrada con un condenado por acoso sexual no consiguió ayer acallar las voces críticas de algunos dirigentes del partido contra el cuestionado secretario general socialista.

López compareció por la mañana para asegurar que Pérez Rubalcaba, que sólo actuó una vez consumada la votación y cuando varios dirigentes se habían mostrado escandalizados, conocía la "generalidad" y no los "pormenores" de la moción. Es más, fue Rubalcaba, según López, el que corrigió "de plano" la situación cuando fue "consciente" de los pormenores de la moción, al pedir al alcalde, Samuel Folgueral, que dejase el cargo, algo que finalmente no hizo ya que abandonó el PSOE.

El máximo responsable del PSOE andaluz, José Antonio Griñán, sin embargo, no parece dispuesto a dejar las cosas ahí y reclamó la necesidad de "someter a explicación" en los órganos federales del partido el apoyo inicial a la moción para determinar "por qué desde el primer momento no se ha visto que iba a producir lo que ha provocado".

"Rubalcaba es un líder social y las responsabilidades orgánicas en el sentido de gobernar el partido están donde están", aseguró el líder del PSOE andaluz, que advirtió que "ahí es dónde habría, en todo caso, que someter a explicación lo que ha ocurrido y por qué desde el primer momento no se ha visto que iba a producir lo que ha provocado".

López se echó encima la responsabilidad de la decisión y reconoció, según informa Europa Press, que cometió un "error de apreciación", aunque aseguró que "lo más importante" es que el partido ha "pedido disculpas" y ha "rectificado".

López reconoció que la vicesecretaria general, Elena Valenciano, que no acudió a la reunión permanente de la Ejecutiva, había estado desde el primer momento en contra de la moción, que él apoyó al "cegarse" por la posibilidad de que Álvarez saliera de la política, aunque reconoció un "error de apreciación" al dar su visto bueno.

"El PSOE ha hecho una mala operación, aunque algunos objetivos eran positivos. El PSOE lo ha hecho mal y lo importante es que ha habido un reconocimiento de un error y una rectificación".

Refrendado en el puesto

López, que no ha presentado su dimisión aunque puso su cargo a disposición del partido, que le ofreció su respaldo, negó que el caso de Ponferrada haya agrietado el liderazgo de Rubalcaba.

Sin embargo, el portavoz parlamentario del PSdeG, Abel Losada, sí admitió ayer que el caso de Ponferrada se sumó a las "divergencias" de su partido con la dirección federal por la celebración de primarias.