Vargas Llosa declinó el ofrecimiento del gobierno por la ligereza de la petición

El pasado 20 de enero no sorprendió que Mario Vargas Llosa rechazase el ofrecimiento de presidir el Instituto Cervantes. Era la segundas vez que declinaba la propuesta. Muchas son las voces que en privado apuntan a que la causa principal fue "la ligereza de la ocurrencia del gobierno" y su necesidad de establcer una relación con España sin tintes políticos.

A pesar de sentirse "honrado" el escritor peruano comunicó por carta al presidente del gobierno Mariano Rajoy su negativa a ostentar el cargo sin revelar los verdaderos argumentos de su decisión.

El entorno más cercano del escritor peruano considera que el equipo del Mariano Rajoy no tenía una idea clara de a quien ofrecían el puesto ni las razones que llevaron al premio Nobel a declinar la invitación en el año 1996 durante el mandato de José María Aznar.

El autor latinoamericano ha manifestado en contadas ocasiones el amor que tiene a España. Tras su enfrentamiento electoral contra Alberto Fujimori éste amenazó con quitarle la nacionalida peruana y para evitar ser un apátrida solicitó la nacionalidad española. Allí recibió una "acogida con los brazos abiertos", en boca del propio escritor, en un momento en que se había convertido en un "paria".

Por ello dicen los que más le conocen que la vinculación al partido popular en materia cultural le habría supuesto un lastre en sus "relaciones plenamente libres" con España y sin ninguna atadura más que sus intereses intelectuales.

Otros motivos

Los motivos que más resuenan en los mentideros sociales son el miedo a que las cargas burocráticas y de representación a que conllevan estos cargos públicos le resten tiempo para escribir próximas obras que ya tiene en mente. Los comentarios más desafortunados comentan que su negativa al gobierno popular sería el temor a que su avanzada edad no le permita desarrollar las competencias con la diligencia oportuna.