Los bancos prestaron 1.180 millones a Valencia para evitar los impagos

La Generalitat Valenciana no sólo recibió dos adelantos del Gobierno central y 600 millones de préstamos bancarios para hacer frente a sus obligaciones de fin de año, entre ellas dos vencimientos de deuda, uno de los cuales pagó con retraso, sino que recibió otros 580 millones de entidades financieras, sobre todo del Instituto de Crédito Oficial (ICO).

Así lo reveló ayer el consejero de Economía, Enrique Verdeguer, quien reconoció a elEconomista que los vencimientos de estos préstamos, el 30 de abril, coinciden con el peor momento del calendario de la deuda valenciana, en mayo, de manera que en menos de un mes afrontará vencimientos por 2.714,3 millones.

Las circunstancias en las que el Ejecutivo valenciano salvó la crisis de liquidez se van conociendo poco a poco. Primero fue un adelanto de 480 millones del Gobierno central -todavía con Elena Salgado en funciones- para afrontar el vencimiento de los bonos para minoristas (patrióticos) del 22 de diciembre. Como no era suficiente, ese mismo día -el de la investidura de Rajoy-, Alberto Fabra convenció a cinco bancos para que le prestaran 600 millones. Estas entidades fueron CaixaBank, Bankia, BBVA, Sabadell y el Instituto de Crédito Oficial (ICO). Sin embargo, la Generalitat llegó a fin de año sin dinero para las nóminas y con el vencimiento de un préstamo de 123 millones que el Deutsche Bank se negaba a renovar. Las gestiones se intensificaron, Verdeguer y el consejero de Hacienda, José Manuel Vela, viajaron a Madrid a negociar con miembros del Gobierno de Rajoy y finalmente se obtuvo un segundo préstamo de 580 millones, buena parte de él procedente del ICO. Con eso se pudieron pagar las nóminas y los compromisos con los farmacéuticos, pero no la devolución del préstamo del Deutsche Bank, que se retrasó hasta el 3 de enero, como ya es conocido.

ICO, Bankia y Banco CAM

Según explicó Verdeguer, los préstamos que suman 1.180 millones tiene unas condiciones similares a las del último dinero captado por la Generalitat, en torno al 5% de interés anual, y su plazo es de cuatro meses, con vencimiento el lunes 30 de abril. Cuatro días después vencen 530,8 millones -incluidos intereses- en pagarés adquiridos por Bankia, y el 9 de mayo, la misma cantidad en favor de Banco CAM. Estos pagarés a 18 meses corresponden a la última vez que el Gobierno de Francisco Camps echó mano de Bancaja y CAM para financiarse. Por último, el 27 de mayo tiene que devolver 472,7 millones de los bonos patrióticos emitidos un año antes.

El consejero valenciano cree que la situación será menos apurada de lo que apuntan esos 2.714 millones -el presupuesto anual de la Generalitat es de 14.988 millones-, ya que un tercio de los préstamos que se firmaron este fin de año corresponden al ICO, que "los renovará sin ningún problema". Respecto a los pagarés, la Generalitat ya no controla a las prestamistas, ahora Bankia y Sabadell-Banco CAM, pero Fabra mantiene buenas relaciones tanto con Rodrigo Rato como con Josep Oliu, presidente del Sabadell, que le apoyaron en la reciente crisis de liquidez. Una prueba de hasta qué punto Banco CAM sigue apoyando al Ejecutivo valenciano se producirá el próximo 18 de enero, cuando toca renovar un préstamo a tres meses de 200 millones concedido en 2011 y renovado en dos ocasiones, la última bajo la administración del Frob.