España
Rouco Varela, una figura "desgastada" dentro de la Iglesia Católica
El cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Antonio María Rouco Varela, cumplirá este sábado los 75 años, coincidiendo con la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Madrid y deberá presentar su renuncia al Papa Benedicto XVI.
En cualquier caso, es previsible que esta renuncia no se haga efectiva hasta que finalice el próximo mandato del cardenal Rouco al frente de la CEE, cargo para el que fue reelegido por tercera vez el pasado mes de marzo.
El día 20, el cardenal ofrecerá una comida al Pontífice en el Palacio Arzobispal, a la que asistirán el cardenal arzobispo de Barcelona, Lluis Martínez Sistach, los obispos de la provincia de Madrid, los obispos auxiliares de Madrid y el Séquito Papal.
Con motivo de su cumpleaños, el Centro Educativo Fuenllana de Alcorcón ha elaborado un menú especial basado en aperitivos -- aceitunas españolas, tostas de foie, cucharitas de corazón de alcachofa con holandesa y tabla de ibéricos y quesos--, salmorejo cordobés con virutitas de jamón serrano, solomillo de ternera y helado de limón con salsa de bayas de enebro y gelatina de gin tonic de postre.
El cardenal ya organizó una Jornada Mundial de la Juvetud cuando se encontraba al frente de la diócesis de Santiago de Compostela, ciudad donde se celebró la IV JMJ con el Papa Juan Pablo II en el año 1989.
Además, se ha convertido en el presidente de la CEE que más años ha sido elegido para estar al frente de los obispos españoles --cuatro trienios no consecutivos-- superando al cardenal Vicente Enrique y Tarancón, que estuvo un año en funciones y tres trienios.
Una figura muy "desgastada"
Independientemente de los deseos del Papa y del propio Rouco, la verdad es que la salud del cardenal no es del todo buena tras tener que someterse a varias intervenciones quirúrgicas.
Según recoge El Confidencial, las fuentes cercanas al líder de la Iglesia española han explicado que lo normal sería que se mantuviera al frente un año o dos más, pero aún así afirman que no parezca que Rouco quiera seguir al frente.
"Cree que ya ha cumplido y que su figura está muy desgastada", han declarado, insistiendo en que los múltiples enfrentamientos entre el cardenal y el Gobierno los últimos ocho años le han convertido en una figura muy cuestionada entre los sectores progresistas de la Iglesia.
La autorización del Papa Benedicto XVI para que Rouco Valera abandone la Conferencia Episcopal podría suponer un guiño hacia estos sectores, que piden una apertura de la Iglesia española.