Energía

Enagás espera ganar 443 millones en 2018 y crecer al 3 % hasta 2020



    Madrid, 20 feb (EFE).- Enagás prevé crecer a una media anual del 3 % en el periodo 2016-2020 y espera finalizar 2018 con un beneficio después de impuestos de aproximadamente 443 millones de euros, ha anunciado hoy su presidente, Antonio Llardén.

    Llardén, en la conferencia en que ha presentado a los analistas los resultados de 2017, ha dicho que para 2018 el compromiso de la compañía es repartir un dividendo con cargo al beneficio neto de 2018 de 1,53 euros por acción, un 5 % superior al de 2017.

    Para el periodo 2018-2020, ENAGAS (ENG.MC)tiene previsto invertir aproximadamente 650 millones de euros y situar su endeudamiento, sin contar integraciones como la de la regasificadora chilena GNL Quintero, en torno a los 3.650 millones de euros en 2020.

    De esos 650 millones de inversión, el 80 % se destinará a España y el resto será inversión internacional.

    Asimismo, el gestor de transporte de gas prevé repartir a los accionistas un dividendo que crecerá un 5 % cada año hasta 2020, de forma que pasará de 1,46 euros en 2017 a 1,68 euros al finalizar 2020.

    En cuanto al crecimiento del beneficio después de impuestos en un 3 % de media anual en el periodo, el presidente de Enagás ha señalado que los ingresos por las participadas compensarán la ausencia originada por los retrasos en la regasificadora de Granadilla, en Canarias.

    Llardén ha explicado que esperan que en 2018 continúe la sólida generación de caja de la compañía, que permitirá reducir la deuda neta en 380 millones.

    En cuanto a las inversiones actuales de la compañía, ha indicado que la del gasoducto Transadriático (TAP, por sus siglas en inglés), en el que Enagás participa con un 16 %, presenta ya un grado de avance del 65 % y su puesta en marcha está prevista para marzo de 2020.

    Ha recordado que el Banco Europeo de Inversiones (BEI) aprobó recientemente una financiación de 1.500 millones para el proyecto, cuyo coste asciende en total a unos 4.500 millones, y ha añadido que se espera cerrar su financiación en 2018, dentro de la cual a Enagás le corresponderá al final 270 millones.

    También ha señalado que el TPA, que entrará en funcionamiento en marzo de 2020, ya aportará en ese ejercicio 36 millones al beneficio neto.

    En cuanto a las actuaciones para recuperar la inversión que hizo Enagás en el Gasoducto del Sur Peruano (GSP), cuya concesión fue retirada al consorcio del que formaba parte Enagás, ha recordado que ya han iniciado un procedimiento de trato directo con el Ejecutivo de ese país, donde espera que, tras el procedimiento de reprobación al presidente y el cambio del Gobierno, vuelva la "calma" para poder establecer un diálogo y negociación que lleve a un posible acuerdo.

    En cuanto a la creación de una sociedad específica para el negocio internacional, Llardén ha respondido que en ningún caso se tratará de vender participaciones, sino de juntar activos con otros socios para crecer.

    Ha añadido que Enagás busca un socio con parecidos objetivos y que dé una base para seguir creciendo, y ha vaticinado que, aunque no será automático encontrarlo, algún resultado puede haber a lo largo de 2018.

    En cuanto al futuro plan estratégico de la compañía, Llardén ha respondido que en 2019 o 2020 se hará el nuevo, una vez que se tenga ya clara la estructura regulatoria para el gas que entrará en vigor en enero de 2021.

    Aún así, ha avanzado que ese plan partirá de nuevas hipótesis, como los ingresos complementarios que vendrán del TPA y una mejor situación para el sector gasista, ya superado el impacto del cambio en 2014 de la regulación, que ya no necesitará de "decisiones quirúrgicas importantes", y con la perspectiva de que el déficit de tarifa habrá desaparecido en 2023 o 2024, si no antes.