Las expectativas de inflación de la eurozona caen a su mínimo desde octubre
La tasa de inflación implícita a cinco años, que muestra dónde esperan los inversores que estén en 2020 las previsiones de crecimiento de los precios para 2025, cayó hasta el 1,6625 por ciento, aunque la rentabilidad en el mercado de bonos de la eurozona permanecía firme.
Incluso aunque la medida ha sido criticada por ser demasiado sensible a los movimientos a corto plazo en los precios del petróleo y por estar basada en instrumentos no líquidos, es seguida muy de cerca por los inversores y por el Banco Central Europeo (BCE).