Nazca destina 60 millones en franquicias para competir con Restalia y Zena
El fondo de capital riesgo español Nazca, a través de la filial de reciente creación Foodbox -en la que controla un 90%-, va a hacer una sólida apuesta por el sector de las franquicias de restauración en España al calor de la recuperación del consumo interno y el alza constante en la llegada de turistas.
Augusto Méndez de Lugo, director general de Foodbox, el equipo directivo posee el otro 10%, explica que el plan de negocio a cinco años presentado por estos directivos a Nazca y aprobado por el fondo incluye un desembolso de 60 millones para adquirir y desarrollar enseñas con el objetivo de configurar un grupo de hasta 400 establecimientos.
El primer paso ya se ha dado hace un mes con la compra de Santagloria al grupo catalán Europastry (que aporta las enseñas de panaderías y cafeterías/pastelerías Santagloria, El Molí Vell y L'Obrador) y del grupo andaluz Taberna Volapié. El importe de la compra, no desvelado, está incluido en los 60 millones citados. Entre ambas suman 90 locales y la previsión en el próximo lustro es que ambas incrementen su red en un 70%, hasta los 150 locales.
Es decir, las nuevas operaciones de compra que negocia Foodbox especialmente para este año y 2015 deberán aportar otros 250 establecimientos. Si se cumplen los planes de alcanzar la red de 400, Foodbox se situaría en el top de compañías españolas de franquicias de restauración, por detrás del líder Restalia (100 Montaditos) y en niveles similares a los de Grupo Zena (Burger King en España) o Vips. "Nuestro objetivo, más que lograr un volumen de facturación, es la rentabilidad", precisa el directivo.
Criterios de compra
¿Cuáles son los objetivos de la empresa, cuyo presidente es Carlos Pérez Tenorio, exdirector de 100 Montaditos en EEUU? Méndez de Lugo define los tres posibles criterios a la hora de hacer más adquisiciones: "Podemos apostar por el desarrollo de enseñas ya consolidadas, como ha ocurrido con las dos primeras compras. También barajamos potenciar el crecimiento de una marca nueva. O bien convertirnos en masterfranquiciado de marcas ya existentes o que aún no existan en España para desarrollarlas en el país".
En cuanto a si detecta que se estén sobrevalorando los activos ante el fuerte resurgir de las operaciones de compra y venta por parte de fondos de capital riesgo los últimos meses, Méndez de Lugo señala que no y que lo que sí ve es interés por la franquicia en general.
El directivo destaca la buena experiencia de Nazca en el sector franquicia -entró en Rodilla en 2003 y vendió en 2005, año en que invirtió en Lizarrán, de la que desinvirtió dos años después- y asegura que el fondo nacido hace 14 años ha apostado con convicción por el proyecto de Foodbox. ¿Qué pasará una vez ejecutado el plan dentro de cinco años? "Comprendemos que los inversores de capital riesgo tienen sus tiempos de permanencia, pero nosotros en eso no entramos, nuestra voluntad es permanecer como equipo directivo ya que nuestra experiencia es la de hacer crecer compañías", asegura. En este sentido, los fundadores de Volapié se mantienen en la empresa como franquiciados y también como asesores.